La triste razón por la que 'Enganchados a la muerte' dejó de ser una secuela de 'Línea mortal'

La triste razón por la que 'Enganchados a la muerte' dejó de ser una secuela de 'Línea mortal'
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Este pasado viernes llegó a los cines españoles 'Enganchados a la muerte' ('Flatliners'), una puesta al día de 'Línea mortal' ('Flatliners') que en un principio se nos vendió como una continuación por Kiefer Sutherland, quien dio vida a Nelson en la cinta original de Joel Schumacher. Sin embargo, la lamentable película de Niels Arden Oplev ha acabado siendo un remake de lo más descafeinado, aunque lo curioso es que estuvo a punto de ser más que eso.

Los que ya hayan visto 'Enganchados a la muerte' recordarán que Sutherland hace una aparición secundaria como el Dr. Barry Wolfson. Su presencia no aporta nada a la película más allá de que también fuese uno de los protagonistas de 'Línea mortal', pero fue una decisión de montaje de última hora que no adquiere un significado que la hubiese convertido en una secuela, pues se acabó eliminando una escena en la que, en palabras de Oplev, sucedía lo siguiente:

Él venía a decir: "no podéis engañar a la muerte, y creerme creedme, lo sé. Confiad en mí, lo sé" Era una escena que le gustaba al público adulto, porque era en plan "Oh, es él, se ha cambiado el nombre, pero es Nelson de la película original."

Está claro que no es una confesión directa, pero sí es un guiño muy claro a los amantes de la cinta original. La duda está entonce en saber qué les llevó a tener que prescindir de ella, y la respuesta es clara, la ignorancia de los jóvenes:

Mortal

El público joven no entendía lo que había detrás de la escena. Estaban en plan "¿Por qué... de qué demonios está hablando ese tío?" Al final, ralentiza el ritmo del film y decidimos que el público joven, la nueva generación, era el objetivo de la película. Y el público adulto que recuerde la película original quizá sabrán quién es el personaje de Kiefer. Es ambiguo, pero creerán que de alguna forma es él y tendrán que vivir con ello. Pero aún así es una gran escena.

Entiendo el motivo del descarte, pero eso de hacer que el público asuma algo porque sí me parece bastante perezoso. De hecho, no hay en la película la más mínima señal que apunte hacia esa posibilidad y el resto se parece demasiado a la cinta original -vamos, que ya no cuela lo de venderla como secuela-. Sin la fuerza de ésta y acumulando errores por todas partes, eso sí. El resultado es que al final a prácticamente nadie le ha gustado, así que podrían haberlo dejado para que al menos nos quedase esa curiosidad...

Vía | Gizmodo

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