Cinco razones para ver 'Crematorio'

Esta noche laSexta estrena 'Crematorio';, la ficción nacional más aclamada de 2011 que por fin se emite en abierto. ‘Crematorio‘ llegó el año pasado a la programación de Canal +, siendo una de las primeras series de producción propia realizada por la cadena, que escogió la novela homónima de Rafael Chirbes para realizar una serie sobre la corrupción urbanística en España. El resultado no pudo ser mejor y, aunque hemos tenido que esperar demasiado, a partir de esta noche la audiencia podrá disfrutar de los ocho capítulos que tiene la primera y única temporada de la serie.

‘Crematorio’ narra la historia de la familia Bertomeu, centrada en el papel que juega Rubén Bertomeu y cómo sus acciones empresariales afectan al entorno familiar. Rubén Bertomeu es un promotor inmobiliario dispuesto a realizar todo lo que esté a su alcance por llevar a cabo sus proyectos urbanísticos. La historia comienza con la muerte del hermano de Rubén, justo en el momento que él tiene entre manos la creación de Costa Azul, un ambicioso proyecto inmobiliario en la Costa del Mediterráneo por el que no le importará sobrepasar la barrera de la legalidad, sobornar a cargos políticos o chantajear a hombres poderosos.

José Sancho y compañía

Por muy cuidada que sea una ficción para que ésta se sostenga tiene que tener un reparto que esté a la altura y ‘Crematorio’ no podría tener uno mejor. Por un lado, encontramos un magistral José Sancho que se mete en la piel de uno de los personajes más atractivos que hemos visto en la pequeña pantalla en los últimos años. Rubén Bertomeu es un hombre ambicioso, capaz de hacer cualquier cosa por conseguir sus objetivos y encuentra en José Sancho una interpretación impecable, digna de recibir todos los galardones televisivos que premian los mejores trabajos que se realizan en la televisión de nuestro país.

Y, por otro lado, y no menos importante, ‘Crematorio’ cuenta con unos secundarios que cumplen con las altas expectativas que se marcó la serie. Alicia Borrachero como Alicia Bertomeu, la hija del promotor inmobiliario, Montserrat Carrulla como Teresa, la madre de Rubén, Manuel Morón como Llorens, concejal de urbanismo o Pau Durá como Zarrategui, el abogado de la familia, son solo algunos de los actores que brillan con luz propia en esta ficción. ‘Crematorio’ cuenta con uno de los mejores repartos que se han visto en mucho tiempo, por lo que la audiencia puede disfrutar de verdaderas actuaciones de calidad.

Una serie que no busca a la audiencia

‘Crematorio’ fue creada para Canal +, una cadena de pago, y nunca estuvo pensada para ser emitida ante un público mayoritario, algo que aunque suene paradójico es uno de los puntos a favor con los que cuenta la ficción. ‘Crematorio’ no tiene actores para ganarse a sectores de la audiencia, ni tampoco incluye tramas de relleno sin fundamento alguno. La serie es lo que es, una adaptación de la novela de Rafael Chirbes que parece que ha contado con gran libertad en su producción, aspectos que finalmente llegan al espectador y se valoran positivamente.

Radiografía de la corrupción urbanística

Los creadores de ‘Crematorio’ no dudaron en afirmar que la serie supone una radiografía de la corrupción urbanística que se ha dado en los últimos años en nuestro país, afirmación con la que no podría estar más de acuerdo. Para entender la situación que vive hoy nuestra sociedad a veces es bueno volver la vista atrás. Eso es lo que nos permite hacer ‘Crematorio’, echar un vistazo a lo que han sido las últimas décadas en España, comprobar los límites que fueron rebasados y darnos cuenta de que parte de la crisis económica que vivimos hoy tuvo su origen en algunas de las acciones que Rubén Bertomeu lleva a cabo a lo largo de su vida.

‘Crematorio’ aparece como una ficción casi de obligado visionado para todos aquellos que buscan en las series algo más que entretenimiento, y ha llegado en un momento perfecto en el que ficciones de este tipo se convierten en necesidades que nuestra televisión reclama con urgencia.

Cuidada al detalle

Fotografía, iluminación, sonido… Todos los aspectos técnicos de ‘Crematorio’ están cuidados al milímetro, lo que la convierte en una producción que está más cerca del género cinematográfico que de la pequeña pantalla. Otra de sus bazas se encuentra en la elección de escenarios naturales para grabar parte de sus tramas, que reflejan la belleza de esa Costa del Mediterráneo que Rubén Bertomeu se empeña en destruir a base de cemento y ladrillo. Y todo esto gira en torno a un estupendo guión, que mantiene la tensión en todos los episodios de la temporada y que deja en evidencia que es posible otro tipo de serie de televisión en España.

Su demandada duración

Ocho episodios de 52 minutos de duración cada uno. ‘Crematorio’ se aleja de esas series interminables que pretenden ocupar toda la noche de una cadena. Algo así es lo que venimos reclamando desde hace tiempo y con esta serie parece que por fin nos han escuchado. Capítulos más breves en los que las tramas están condensadas y no existen subtramas para abultar que no llegan a ningún sitio.Queda por saber cuánta publicidad le dará laSexta a la serie y cómo va a tratar su programación de cara al futuro.

La gran pregunta que nos surge ahora es saber cómo tratará la audiencia masiva una serie como ‘Crematorio’, que hasta la fecha solo ha sido vista por una pequeña minoría. La ficción es distinta a todas aquellas que estamos acostumbrados a ver en nuestra televisión, por lo que de su éxito podría establecerse un punto de inflexión que demostrara que las cosas se podrían hacer de diferente manera. De momento, solo podemos decir que ‘Crematorio’ tiene todos los elementos de las series extranjeras que tanto hemos demandado en el pasado, por lo que ahora es el momento de que nos sentemos delante de la televisión y comencemos a disfrutar de ella cómo se merece.

En ¡Vaya tele! | Los diez mejores estrenos de 2011: ‘Crematorio’

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