'Sons of Anarchy', esto es Charming

En estos días en los que estamos sumergidos en la lista de las Mejores series del siglo XXI (según ¡Vaya Tele!) el mundo sigue girando y con él las series siguen su curso. Y es precisamente una de las incluídas en dicho top la que terminó su segunda temporada la semana pasada con un final de temporada soberbio.

Yo siempre digo que el momento para que una serie demuestre que es buena o no pasa por su segunda temporada, por demostrar si todo el trabajo hecho en la primera temporada era cuestión de suerte. En la segunda temporada la serie pierde el factor sorpresa ya que ya ha presentado sus personajes y el espectador ya está "acostumbrado" a la serie. Por eso las segundas temporadas suelen ser cruciales en el destino de las series. Y 'Sons of Anarchy' se enfrentó este otoño a esta reválida, y la ha superado holgadamente.

Antes de meternos en faena resumamos un poco cómo terminaba la primera temporada. La agente Stahl, de la ATF, estaba decidida a acabar con Sam Crow a cualquier precio, y para ello empleó RICO una ley ideada para perseguir a la mafia y a otras organizaciones criminales. En esa ambición, Stahl hizo parecer a Opie una rata lo que desencadenó en el desafortunado asesinato de Donna por parte de Tig, el brazo ejecutor de Clay. Esta situación provoca un choque entre Clay y Jax, que pretende adaptar el club a la visión de su padre. Esta primera temporada era simplemente magnífica, coronando a la serie como una de esas que deberías ver sí o sí.

Con este ambiente reinante en el club llegamos a la segunda temporada. El club está volviendo a la normalidad, con el regreso de Bobby de la cárcel. Pero la felicidad va a durar poco en SAMCRO ya que pronto llegarán los "malos de la temporada" Ethan Zobelle y la Liga de Nacionalistas Americanos que llegan a Charming con la clara intención de destruir Sam Crow usando todas las artimañas posibles. Pero esta no es una banda, ni otro club de motorista, esta gente lucha a otros niveles. Desde lo más mamporrero hasta el uso de contactos e influencias políticas.

Un vistazo a…
ENFOQUE PROFUNDO Y LENTES PARTIDAS

Gemma Teller, matriarca

'Albification', la season premiére de la segunda temporada de 'Sons of Anarchy', termina con una escena que te deja con los ojos como platos. Gemma Teller es violada por los secuaces de Zobelle para mandar un mensaje al club para que dejen de comerciar con los Mayas ni con los One-Niners, por ser "de color". Este hecho marcará, como no, a Gemma haciendo que pase a ser el centro de las miradas del espectador. La decisión de Gemma es crucial, no va a contar nada porque entonces La Liga gana y ella, como matriarca del club no lo puede permitir, porque desencadenaría una guerra en la que hay mucho o todo por perder.

Gemma Teller intenta sacar toda la fuerza posible a una situación que la ha superado por completo. Si en la primera temporada veíamos a la Gemma fuerte e incluso despiadada en esta segunda la vemos frágil pero con espíritu de superación y, hacia el final de la temporada, contemplamos a una Gemma con ciertos rasgos de megalomanía, de aires de grandeza. Katey Sagal está en su salsa, realizando una gran labor interpretativa. como ya he dicho, escena que sale, escena en la que se lleva toda nuestra atención y no es para menos ya que en ciertos momentos la temporada parece haberse escrito para el lucimiento del personaje.

Jax y Clay, enemigos íntimos

Mientras Gemma lidia con sus asuntos nos encontramos con otro punto de interés, la guerra abierta entre Jax y Clay que comenzó en el momento en que Clay ordenó matar a Opie, que resultó en el asesinato de Donna. Las diferencias entre ambos provocarán el malestar en el Capítulo de Sons of Anarchy que van notando que las cosas no van bien entre los dos. Jax siente la necesidad de desafiar a Clay en cada decisión y eso provoca acciones erróneas por parte de ambos lo cual va acercando a Zobelle a su victoria, ya que como bien se dice "divide y vencerás".

El momento en el que estalla todo es en la cárcel cuando Stahl (cómo te odio) cuenta a Clay que Jax ha estado gestionando la lucha contra Zobelle de forma independiente, provocando una de esas escenas de lucha en las que te dan ganas de participar. Entre eso y un par de decisiones de Jax "por el bien del club" que salieron mal, caldeó lo suficiente el ambiente como para que la situación fuese insostenible. Hasta tal punto que será Gemma la que ponga fin, aunque sea momentáneamente, la guerra entre los dos, narrando su violación.

Vida y Muerte en Sam Crow

Estando ya todas las piezas colocadas bajo el tablero el acto final de la serie se nos prometía épica. Y, desde luego no decepciona ya que el último tramo de la temporada te tiene pegado a la pantalla cada segundo viviendo y sufriendo las tribulaciones de los Sons of Anarchy. Todas las piezas están dispuestas y van cayendo en este trepidante acto. Stahl, Hale, Unser, el IRA Verdadero, Zobelle, la Liga, SAMCRO...

Si durante los primeros episodios el ritmo iba bien, cada cosa sucediendo a su debido tiempo y con guiones sólidos e historias entretenidas (como se suele decir) el acto final es simplemente perfecto, redondeando así una temporada en la que ha estado brillante hasta el último mono.

En definitiva, la segunda temporada de 'Sons of Anarchy' es una auténtica maravilla que te tiene trece episodios con el corazón en un puño. Esta segunda temporada no hace sino confirmar a 'Sons of Anarchy' como una de las mejores series del momento. Lo peor, que tengamos que esperar al próximo otoño con el cliffhanger del final.

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