
La NBA y la Champions League femenina se podrán ver la temporada que viene en Prime Video y Disney+, respectivamente
Llevaba tiempo fraguándose pero finalmente parece que el panorama y la tecnología del streaming está lo suficientemente madura para ponerse las pilas con uno de sus grandes asuntos pendientes. Después de la batalla por la exclusividad de series y películas, llega el momento de competir por los derechos deportivos de las grandes competiciones.
Y es que el deporte se está convirtiendo en el último año en lo próximo que hay que tener en plataformas, en concreto en las que operan en España. Se adelantó Max gracias a contar con Eurosport y parecía que los Juegos Olímpicos de París iban a suponer que la plataforma de Warner se convirtiera en una imprescindible. O, desde luego, indicaban el camino a seguir por el streaming.
Algo, de hecho, con lo que debían meter algo de acelerador. Según un reciente informe de LG la mitad de los espectadores de deportes lo ven a través de aplicaciones de streaming en EE.UU. Esto supone una subida del 29% respecto al año anterior. Mercado, desde luego, hay pero eso no parecía ser correspondido por la oferta... sobre todo después de que fracasaran los planes de hacer una plataforma conjunta entre las grandes cadenas/distribuidoras.
No es culpa, del todo, de las plataformas de streaming. Puede que los derechos deportivos sean el Vietnam de las cadenas de televisión. Mucha inversión y mucho trauma (y con dudas sobre la rentabilidad). Y en este tema de deportes, son Movistar Plus+ (y en menor medida DAZN) los reyes y señores del reino. No voy a meterme en sus prácticas y el tinglado que hay con La Liga pero, desde luego, el forofo del fútbol se deja un pastizal para poder ver su deporte favorito.
Canasta de cambio
Sin embargo, huelen aires de cambio. En el margen de apenas dos semanas se han anunciado dos acuerdos de competiciones deportivas de nivel internacional: Prime Video emitirá 87 partidos de la NBA (tanto de liga regular, NBA Cup y playoffs), además de 30 de la WNBA gracias a un acuerdo de once años con la competición baloncestística; Disney+, por su parte, será sede de la Champions League femenina hasta la temporada 2029/2030. Ambos, importante este detalle, sin coste adicional.
Es verdad que con la NBA seguimos encontrándonos en nuestro país un escollo con el tema de los horarios (pero eso con Movistar Plus+ también pasa) y que todavía el deporte femenino es algo más minoritario, pero este es un buen primer paso para probar cómo funcionan la emisión de ambos deportes en streaming. Es más, es de esperar que con los años la oferta deportiva vaya creciendo.
Ahora es cuestión de ver si otras plataformas responden. Netflix ya emitía tímidamente algún que otro evento, además de ser la nueva casa de la WWE; Max sigue manteniendo de momento su complemento Deportes con el que se puede ver, actualmente, competiciones como el Giro D'Italia y Roland Garros. Pero una cosa está clara: las OTTs ya no son solo para el cine y las series.
En Espinof | La pasión por el wrestling sigue muy viva en nuestro país
En Espinof | Las mejores películas sobre deportes
Ver todos los comentarios en https://www.espinof.com
VER 2 Comentarios