Schmicago es una gozada: la temporada 2 de 'Schmigadoon!' divierte y entusiasma con su parodia de los musicales de los 70

Casi dos años después de que llegase como un bálsamo en pleno verano, 'Schmigadoon!' regresa a Apple TV+ con una temporada 2 de seis episodios. Y, por si había dudas, ha vuelto en plena forma con unos episodios de tinte más oscuro (acorde con la época) y bastante más divertida.

La temporada arranca, también, un par de años después de la primera excursión al pintoresco pueblo. La vida de Josh y Melissa (Keegan-Michael Key y Cecily Strong) se ha vuelto completamente rutinaria, aburrida e infeliz. De pronto, les llegará la inspiración de volver al mágico mundo de Shmigadoon!... solo para encontrárselo completamente cambiado. Bienvenidos a Schmicago!

El primer episodio se dedica a ver a los ya conocidos habitantes del pueblo en sus nuevos roles. Ajenos a vidas pasadas pero, igualmente, parecen haber nacido para interpretarlos en lo que una escapada de una noche para evadirse se complica, demasiado, para la pareja.

Más oscura, sexi... y divertida

Y es que el lugar con el que se topan es el de musicales mucho menos coloridos que los de los años 40. Cinco Paul, creador y compositor principal de la serie, nos sumerge en el estilo que caracteriza la obra de algunos de los grandes compositores de Broadway: desde Stephen Sondheim hasta Andrew Lloyd Weber pasando por John Kander.

De hecho, temáticamente el guion juega con ese contraste de épocas, incluyendo cierta pérdida de la inocencia o la extinción del musical naïf, por llamarlo de una manera, de evasión pura y de finales felices. Esos conceptos vuelan sobre los protagonistas en lo que la trama va avanzando y se van produciendo los giros. Hay, también, una consciencia de que cincuenta años después lo que entonces podía provocar hoy es prácticamente inocuo.

Todo esto contado a través de estupendos números musicales ejecutados espléndidamente. La mezcla de humor y guiños es continua en lo que disfrutamos de Alan Cumming, Kristin Chenoweth, Dove Cameron, Jane Krakowsky, Ariana DeBose y Tituss Burgess entre muchos otros

Un pueblo demasiado ecléctico

Quizás el peor aspecto de esta temporada 2 de 'Schmigadoon!' venga precisamente del mundo de Schmicago!, que es muy (a lo mejor demasiado) ecléctico en pro de abarcar todo el abanico de musicales que Cinco Paul y Christopher Willis buscan homenajear.

Al igual que en esa época lo mismo tenías un Jesucristo Superstar que un Annie, un Sweeney Todd, un Hair o un Chicago, los personajes parecen estar saltando continuamente entre décadas en un cóctel difícil de hippies y cabarets. Si bien todo esto dota de un amplio espectro de tonalidades, coreografías y estilos, te deja en lo estético una sensación de un mundo poco cohesionado. Lo que, en realidad, no impide que quieras quedarte de nuevo a vivir aquí.

Imagino que a la hora de juzgar cada temporada de la serie influye tus preferencias por la época musical de turno... entonces no sé hasta qué punto el que prefiera (y conozca mejor) los grandes éxitos del género en los setenta hace que me incline a pensar que Schmicago! es mejor.

Creo sinceramente que está segunda temporada está bastante más pulida en todos los sentidos, tanto en el guion como en la dirección y, por supuesto, la música. Toda una gozada.

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