'Los tres mosqueteros: D'Artagnan' es una película perfecta para los amantes del buen cine de aventuras a la antigua usanza

'Los tres mosqueteros: D'Artagnan' es una película perfecta para los amantes del buen cine de aventuras a la antigua usanza

7 comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail
Los Tres Mosqueteros Dartagnan

Pocas historias han sido adaptadas en tantas ocasiones como la de 'Los tres mosqueteros'. La novela escrita por Alexandre Dumas ha sido llevada a la pantalla decenas de veces, pero eso no impide que se vuelva a ella cada cierto tiempo. Ahora es el director francés Martin Bourboulon el que ha probado suerte con la que probablemente sea la versión cinematográfica más ambiciosa hasta la fecha.

Dividida en dos entregas -la segunda ya está rodada, así que no hay peligro de que nos dejen a medias-, este viernes 14 de abril llega a los cines españoles 'Los tres mosqueteros: D'Artagnan', una de las mayores superproducciones europeas de los últimos años. Además, esa fuerte inversión se percibe en todo momento en pantalla para dar forma a una película perfecta para cualquier amante del cine de aventuras a la vieja usanza.

La renovación que la hagan otros

Lo primero que queda claro viendo 'Los tres mosqueteros: D'Artagnan' es que aquí no existe ningún tipo de espíritu renovador con la idea de que así sea más sencillo conectar con las nuevas generaciones de espectadores. Eso ya lo intentaron hace no tanto cineastas como Peter Hyams o Paul W.S. Anderson, y no se puede decir que el público reaccionase con demasiado entusiasmo. Aquí sucede todo lo contrario, se vuelve tanto a sus raíces que incluso se incide bastante más de lo habitual en el componente francés del relato.

Eso lleva a que se potencie ese toque de intrigas palaciegas que puede funcionar tanto con los espectadores más veteranos como aquellos que quedasen encantados con esa faceta de 'Juego de Tronos'. Eso sí, no esperéis muchos más puntos en común con la exitosa serie de HBO, pues aquí se plantea una aventura con espíritu clásico que requiere cierta predisposición del espectador para asumir ciertos giros de la historia y que, en líneas generales, es bastante fiel al libro original.

Todo ello no supone que 'Los tres mosqueteros: D'Artagnan' renuncie a un ritmo ágil, esencial para que sus dos horas de metraje se pasen volando y te dejen con ganas de ver ya mismo la secuela. Uno de sus principales méritos es precisamente cómo acierta por ese lado y al mismo tiempo logra definir con bastante acierto a todos sus personajes principales. Ahí lo único que quizá se eche en falta sea una mayor presencia del lado más despreciable del Cardenal Richelieu interpretado por Eric Ruf, pero a cambio la Milady de Eva Green resulta fascinante, en buena medida por el excelente trabajo de la actriz para resaltar su magnética maldad.

Todo luce y aporta

Mosqueteros

Obviamente, parte importante del presupuesto se ha ido para conseguir un reparto con muchos rostros conocidos en mayor o menor medida por el público, pero también se nota una estimulante preocupación en que el mundo que rodea a los personajes resulte creíble, facilitando así la inmersión del espectador en la historia. Ese despliegue de medios además luce de maravilla en la gran pantalla, tanto cuando el director Martin Bourboulon opta por un acercamiento más clásico y comedido como cuando se desata un poco para potenciar la faceta más espectacular de la película.

Ese equilibrio en lo visual resulta también determinante para que encuentre un punto medio que le impida cuadrar todos los ingredientes de una historia como la que cuenta. De hecho, Bourboulon logra que la película se sienta siempre fresca y contagiosa, encontrando quizá su mejor aliado en François Civil como D'Artagnan. Era especialmente importante acertar ahí y Civil lo borda mostrando esa curiosa mezcla de osadía, nobleza e inocencia que caracteriza a este joven gascón.

De ahí también surge ese tono algo más descarado, ideal para que su componente de pasatiempo de lujo nunca quede de lado. Claro que vais a encontrar aquí grandes combates que harán las delicias de los amantes de las historias de espadachines, pero Bourboulon sabe que no puede confiarlo todo a eso y juega con el contraste entre la esperanza que representan D'Artagnan y los mosqueteros y la oscuridad que acecha sobre Francia y que amenaza con una posible guerra civil.

A eso luego hay que añadir otros alicientes como el resto del reparto, resultando curioso que Vincent Cassel sea el mosquetero con menos presencia pero también el que más brilla, o ese toque francés al que aludía antes. Resulta llamativo que la gran mayoría de adaptaciones de 'Los tres mosqueteros' hayan marginado su presencia, y eso es algo que aquí luce pero sin que sus responsables sientan la necesidad de subrayarlo más de la necesario.

¿Entonces merece la pena verla o no?

Escena De Los Tres Mosqueteros Y Dartagnan

Al final es verdad que 'Los tres mosqueteros: D'Artagnan' no ofrece nada especialmente novedoso, pero lo realmente importante es hacerlo con mimo y talento, y de eso va sobrada esta película. Además, el buen cine de aventuras no abunda tanto últimamente -aunque justo en cartelera tenemos otro título genial de este género-, por lo que espero que consiga el éxito que se merece. Claro está, muy recomendada.

En Espinof | Las 21 mejores películas de aventuras de la historia

Comentarios cerrados
Inicio