'I Needed Color': Jim Carrey nos descubre su pasión por la pintura en este emotivo corto

'I Needed Color': Jim Carrey nos descubre su pasión por la pintura en este emotivo corto
14 comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail

Después de sus primeros escarceos en la gran pantalla como personaje secundario, y tras un notable periplo catódico a finales de los ochenta y principios de la década de los noventa en programas como 'In Living Color', 1994 supuso el salto al estrellato para un Jim Carrey que colgaría el merecido título de rey indiscutible de la comedia de la época. Los tres largometrajes estrenados en ese año —'Ace Ventura', 'La Máscara' y 'Dos tontos muy tontos'—, le catapultaron a una fama que se ha visto diluida recientemente.

El último tramo de su carrera no ha destacado precisamente por ser el más prolífico. Sus últimos papeles principales se remontan a 'Kick-Ass 2: con un par' y 'Dos tontos todavía más tontos'; algo que confirma el distanciamiento progresivo del actor del mundo de la interpretación, y que probablemente tenga algo que ver con su, conocido por todos, complicado estado emocional. Pero, ¿dónde ha estado Jim Carrey últimamente? El fascinante cortometraje 'I Needed Color' nos da la respuesta.

Mentiría si dijese que 'I Needed Color', dirigido y producido por David Bushell y con más de dos millones y medio de reproducciones acumuladas, no me ha tocado alguna parcela del cerebro que me haya hecho pensar y darme una pequeña vuelta al estómago. Haber crecido con las películas de Carrey y verle convertido en una suerte de bohemio existencialista volcado en la pintura y haciendo gala de una sensibilidad que jamás hubiese imaginado ha sido, cuanto menos, sorprendente.

Como habréis visto, el actor recuperó su afición por la pintura hace seis años y, como él mismo afirma, la está empleando para "curar un corazón roto". Sus episodios depresivos y su adicción al Prozac —que no ha vuelto a tomar jamás— se juntaron con el aún reciente suicidio de su pareja sentimental y, a juzgar por lo visto y por sus reflexiones, Carrey ha encontrado una suerte de vía de escape para su dolor y preocupaciones en el arte, la pintura y la escultura.

Además de con sus impresionantes trabajos, me quedaré con la siguiente reflexión del cómico reconvertido en artista:

"Creo que lo que hace a alguien un artista es que hacen modelos y representaciones de su vida interior. Materializan físicamente algo que está inspirado por sus emociones o sus necesidades, o lo que sienten que necesita el público."

Comentarios cerrados
Inicio