¿Cómo ha evolucionado el anuncio de la Lotería de Navidad en los últimos años?

¿Cómo ha evolucionado el anuncio de la Lotería de Navidad en los últimos años?
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A estas alturas, las parodias del anuncio de la Lotería de Navidad de este año se expanden sin control en forma de vídeos o gifs animados, recorriendo las redes sociales y mostrando el ingenio y el sentido del humor (y a veces ese puntito de crueldad) de muchos de los usuarios de internet. Las bromas se repetirán hasta que la saturación haga acto de presencia o hasta que un nuevo objeto de deseo surja en nuestras vidas y todos corramos como locos a burlarnos de él. En esta ocasión le ha tocado al anuncio de la Lotería de Navidad, un spot televisivo que se ha sumado a esos eventos que rodean nuestras vidas y que nos avisan de la inminente llegada de las fiestas navideñas.

Como todo en televisión, este anuncio también ha evolucionado con el paso de los años, sobre todo desde que dejara atrás su figura más representativa allá por el 2005. Desde entonces, su presentación ha ido variando, dando lugar a numerosos spots que han jugado con nuestras ilusiones de cara al sorteo del 22 de diciembre. Puede que adentrándonos en esta evolución demos con algunas de las claves del porqué el anuncio de 2013 está siendo tan comentado y criticado por el común de los mortales, sobre todo al comprobar cómo se ha distanciado de lo que el resto de anuncios nos venía ofreciendo en los últimos años.

1998-2005: El calvo de la Lotería

Que tu marca esté directamente asociada a una imagen o personaje es lo mejor que te puede pasar a la hora de realizar un anuncio de televisión. Solo tienes que seguir aprovechando esa representación, algo que funcionará todavía mejor si cuenta con la complicidad de los espectadores. Eso es lo que ocurrió a partir de 1998 cuando Clive Arrindell apareció por primera vez en el anuncio de Lotería de Navidad, convirtiéndose en nuestro calvo más aclamado. Era una cara amable, carismática, que gustaba a todos y fácilmente identificable con la llegada del sorteo. Su aparición dio buen resultado y se convirtió en la imagen oficial de estos anuncios hasta 2005.

Fue ese el último año en el que el calvo aparecería repartiendo suerte, en un spot que resalta a la perfección las características de los anuncios que contaron con Arrindell como cara visible. Lo más llamativo de estos era que él no se erigía como protagonista absoluto, sino que era el elemento común que tenían todas las historias que se presentaban en los spots (algo importante para entender el rechazo del anuncio de este año). El calvo era ese personaje enigmático que sin hablar nos incitaba a soñar y, como consecuencia, motivaba a los espectadores a comprar lotería para que sus sueños se cumplieran. Acompañado de la melodía de 'Doctor Zhivago' (el emblema musical del sorteo) este personaje se convirtió durante ocho años en todo un mito que pasó a formar parte de la historia de la televisión y cuya marcha fue el final de una época que muchos reclamarían durante los años venideros.

2006/2007: Una nueva era

Con el calvo desaparecido el anuncio introdujo una voz en off masculina que repasaba esas breves postales navideñas que recopilaban algunos de los momentos que se podían vivir en esa época. Los anuncios de 2006 y 2007 contaron con la misma estructura a la hora de presentar a personas en escenas diferentes (en 2006 llevando a cabo hábitos navideños y un año más tarde presentando diferentes perfiles entre los que puede caer la suerte, esta vez de una forma más cercana y solidaria). De una u otra forma esos fragmentos navideños siempre quedarían recogidos en los posteriores anuncios, hasta la llegada de 2013 por supuesto. También se modificó la música, recurriendo de nuevo al mundo del cine para rescatar una de las canciones de 'Cinema Paradiso', que aportaba esa magia necesaria para un anuncio de estas características.

2008: Avanzando en modernidad

Siguiendo con esa presentación de escenas en 2008 encontramos un anuncio que supo combinar muy bien eso de sencillez y modernidad. Manteniendo la voz en off y cambiando de nuevo de música (esta vez a través de un desconocido Lionel Neykov, encontrado en MySpace por los responsables del anuncio) se dio como resultado un anuncio fresco y simpático que nos presentaba la animación de estatuas, globos hinchables y muñecos de nieve. Se trata de un ejemplo de cómo se puede salir del tradicional anuncio navideño rompiendo moldes pero sin perder la esencia que había caracterizado a los anuncios de Lotería de Navidad en los últimos años.

2009: Tirando de tradición

Un nuevo año en el que se seguían ofreciendo esas estampas navideñas tan características. Se retrocedía algo de lo andado el año anterior y se volvía a tirar de los hábitos de las personas para mostrar la ilusión de cara a la celebración del sorteo. Ese año, con la crisis ya iniciada, se pudo ver un mensaje más optimista en el que no se añadieron imágenes nostálgicas. Una vez más se recurrió a una estrategia que hemos visto en los spots que sucedieron a la marcha del calvo como figura representativa, y es que estos anuncios estaban orientados a ligar la Navidad con la celebración del sorteo, combinando los dos símbolos como uno solo.

2010: La diosa Fortuna

Llama la atención que tras la desaparición del calvo en 2010 recurrieran a la diosa Fortuna como representación de la propia Lotería de Navidad. En una breve aparición hizo por un instante la función del mítico personaje del spot, aunque en este caso apareciera repartiendo esa lluvia de millones prometida con cada nuevo sorteo. El anuncio también destacó por recurrir a la temática de los cuentos infantiles, abandonando el realismo que se habían dado en anteriores ocasiones con esas escenas navideñas. Se trata un spot que invitaba a jugar, presentando una propuesta que se salía de todo lo que habíamos visto anteriormente, pero que aún así mantenía las ideas de sueños e ilusión, tan recurrentes en los anuncios de este tipo, y con las que el espectador podía sentirse identificado.

2011/2012: La fábrica de los sueños

En el año 2011, y también durante 2012, pudimos ver el desarrollo de una misma idea que ejemplificaba a la perfección lo que se convertía cada celebración del sorteo de Navidad. Los anuncios jugaron con esa fábrica de los sueños desde la que se recopilan las ilusiones de cada jugador de lotería, transformadas en esas esferas de cristal y depositadas en un bombo enorme. Fueron dos anuncios grandilocuentes, llenos de efectos especiales, donde la voz en off quedaba de nuevo eliminada y donde una vez más se buscaba la emoción del espectador.

Para lograrlo, encontramos esas estampas de personas reales que una vez más eran el motor de la historia que nos presentaban. La música aparecía de nuevo como un elemento imprescindible, para lo que se recurrió a una de las canciones de la banda sonora de 'Eduardo Manostijeras', que se amoldó al milímetro a la esencia de los spots. Ambos entraron a formar parte de la lista de los mejores anuncios que se han rodado en nuestro país en la historia de la televisión.

2013: ¿éxito o fracaso?

Y llegamos a 2013. El año para el que se ha elegido al director Pablo Berger para rodar el anuncio que ha contado con la participación de Raphael, Montserrat Caballé, Niña Pastori, Marta Sánchez y David Bustamente, siendo la primera vez que el spot de Lotería de Navidad recurre a la participación de rostros famosos. Tan novedosa es la propuesta que su actuación es el motor del anuncio, a través de la versión del tema Always on my mind de Elvis Presley que se transforma en ese villancico navideño que no suena tan mal como muchos nos intentan hacer creer. En esta ocasión se explota la anticuada idea de lanzar un spot sin historia, valiéndose solo de la presencia de los rostros conocidos para lanzar el producto, donde además algunos primeros planos facilitan la parodia.

Si comparamos este anuncio con la mayoría de los que hemos repasado en este artículo podemos decir que es el que más viejo aparece, y no solo por su puesta en escena sino también por su idea inicial que como espectadores no nos dice absolutamente nada. Una canción y la aparición de una serie de artistas no debe ser lo único ofrecido por un anuncio de estas características, donde no hay una representación activa del espectador que participe directamente en el anuncio porque ni tan siquiera hay historia que contar. Quizá habría sido más efectivo la elección de un solo artista, que se paseara por el mismo pueblo iluminado y visitando a algunos de sus vecinos mientras cantaba su canción. En vez de ese tenemos la sobria actuación de un quinteto que, a no ser por tres planos, bien podría estar anunciando bombones o champán.

Podemos decir que el anuncio no nos gusta y enumerar los motivos que nos llevan a rechazarlo pero lo cierto es que se trata de uno de los anuncios más comentados que ha logrado uno de los dos objetivos que todo spot se propone: que hablen de él. Su presencia en la televisión se ha vuelto viral y estoy convencido de que será uno de los más recordados de los últimos años, aunque sea por esos elementos que han sido parodiados. Otra cosa será si todo este furor consigue el segundo de sus objetivos principales: provocarnos esa necesidad de acudir a nuestra administración de lotería y comprar un décimo para el próximo sorteo de Navidad.

En ¡Vaya tele! | Las parodias del anuncio de Loterías, la imagen de la semana

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