Paralelamente al ciclo Western, que será tratado con asiduidad en estas páginas, empezamos hoy un repaso a casi la mitad de la obra de unos de los cineastas más originales e influyentes que ha tenido el séptimo arte en toda su existencia, y eso que hablamos de alguien que sólo dirigió siete películas. Sergio Leone es su nombre, e imagino que no necesita presentación para muchos de vosotros. ‘Hasta que llegó su hora’ (‘C’era una volta il West’, 1968) supone una de las cotas más altas alcanzadas en su cine, la primera entrega de una trilogía, no intencionada en principio, que habla sobre la historia de los Estados Unidos. Tres películas, conformadas por las posteriores ‘Agáchate, maldito’ (‘Giù la testa’, 1971) y ‘Erase una vez en América’ (‘Once Upon a Time in America’), y que tardaría la friolera de 16 años en ver completada en contraposición a la previa Trilogía del dólar, que le llevaría tres años de su vida, reportándole fama, dinero y prestigio.
Resulta cuanto menos curioso la evolución de Leone, teniendo en cuenta el éxito de sus tres spaghetti westerns con Clint Eastwood. De ‘Por un puñado de dólares’ (‘Per a pugni di dollari’, 1964), por la que cobró mal y tarde, a la opulencia del presente film, en el que tuvo libertad absoluta. Sin embargo, hay que señalar que Leone no quería hacer un western, pues consideraba que ya lo había dicho todo sobre el género —prácticamente lo había reinventado—; su proyecto más querido era realizar la adaptación de una novela titulada ‘The Hoods’, que años más tarde se convertiría en el mítico film protagonizado por Robert De Niro. La Paramount le prometió a Leone financiar la filmación del ansiado film a cambio de que aquél rodase otro western. Por supuesto, y ya con dinero americano, la presencia de Clint Eastwood era otra de las condiciones.
Así pues, el personaje apodado Harmónica fue en principio ofrecido a Eastwood, debido al éxito que sus tres colaboraciones con Loene tuvieron en los USA, cuando fueron estrenadas en bloque en 1967. Lamentablemente la relación entre el actor y el director no estaba precisamente en su etapa más fructífera. Ambos se habían enfadado varias veces, y se atribuían cada uno el mérito de la Trilogía del dólar. A Eastwood no le gustó nada el personaje de Harmónica y lo rechazó tajantemente, saboreaba las mieles del éxito y no necesitaba a Leone, quien se sintió muy molesto por la negativa del actor. Con todo el director de ‘La muerte tenía un precio’ (‘Per qualche dollaro in più’, 1965) insistió una vez más, y le ofreció a Eastwood un cameo compartido con Eli Wallach y Lee Van Cleef. Se trataba de abrir la película con tres personajes que recordarían a los de ‘El bueno, el feo y el malo’ (‘Il buono, il brutto, il cattivo’, 1966) para ser abatidos por el personaje principal. Una especie de guiño, que además resultaría muy coherente con el discurso de Leone en esta película.

Una vez más, en un acto que denota un total egocentrismo, Eastwood rechazó la oferta indignado. No se le ocurriría jamás aparecer en una película y ser abatido al inicio de la misma por otro personaje. Wallach y Van Cleef estaban encantados con la idea, a modo de homenaje al anterior y exitoso film de Leone, pero ante la negativa de Eastwood, el director italiano tuvo que echar mano de otros tres actores, también ligados al western: Jack Elam, Woody Strode y Al Mulock. Este último se suicidó —el único inconveniente del rodaje, además de los problemas con el alcohol de Jason Robards— en el rodaje de la famosa secuencia que abre el film, toda una declaración de intenciones por parte del director. Más de diez minutos en los que Leone suspende el tiempo, uno de los personajes pone música al instante —tres pistoleros que han ido a esperar a la estación de tren a un hombre para matarlo, se enfrentan al mismo en un duelo injusto—, y queda claro que lo que vemos es una exageración intencionada. La fábula hace acto de presencia en el western como nunca, y el carácter operístico de la película —algo de lo que siempre renegó Leone— queda claro en su desarrollo.
Érase una vez en el Oeste
Es indudable que el título original del film es mucho mejor que el que recibió en nuestro país, en el que, por impactar al espectador con los títulos, tenemos perlas como la presente. En cualquier caso es lo de menos, ‘Hasta que llegó su hora’ resume a lo grande todo lo que Sergio Leone sentía por el western de un modo distinto a lo que hizo en su Trilogía del dólar. Hombre de cine como pocos —recordemos que ya desde niño siempre vivió en ambiente cinematográfico debido a la labor de su padre, director de cine—, a muchos les sorprendió el enorme conocimiento que un italiano tenía de un género propiamente estadounidense. A través de ese conocimiento, Leone hace una declaración de amor absoluta hacia un tipo de cine del que estaba enamorado —con John Ford a la cabeza—, y lo más importante es que que consigue hacernos partícipes de esa emoción. ‘Hasta que llegó su hora’ es un film visceral en todo su esplendor, y el gran acierto es Leone al respecto fue sortear lo fácilmente emotivo y adentrarse en un profundo y arrebatador lirismo.
Miremos a donde miremos en la película existe una referencia de lo más sentida y sincera. La breve aparición de Woody Strode rememora al John Ford más otoñal, y el hecho de convertir al buenazo de Henry Fonda —también actor Fordiano— en un asesino implacable es uno de los mayores aciertos de casting que mis ojos han visto nunca. Al respecto cabe señalar la anécdota en la que Fonda, no muy convencido de aceptar el papel, se le presentó a Leone con lentillas oscuras y un gran mostacho. El director le ordenó deshacerse de ello, pues quería que el público reconociese al gran Henry Fonda en la piel de un asesino. Su aparición en escena representa un shock para todo aficionado. Tras asesinar a tres miembros de una familia, varios pistoleros con amplias gabardinas parece surgir como por arte de magia. Leone se acerca por detrás de ellos con un sugerente travelling que da la vuelta cuando llega a Fonda y nos descubre su rostro. Acto seguido mata a un niño ante el estupor de la audiencia. Leone no sólo indaga en nuestros recuerdos del western, sino que los sacude violentamente.

Charles Bronson, recogiendo el testigo dejado por Eastwood, también es una referencia dentro del género. Su pétreo rostro es el más indicado para dar vida a Harmónica, ese pistolero sin nombre y de oscuro pasado que representa la venganza pura y dura —a través de un flashback, marca de la casa, sabremos qué relación tiene con Frank (Fonda), al que en sus encuentros sólo le recuerda los nombres de hombres a los que aquél mató—. Un genial Jason Robards —para el que suscribe, realiza la mejor interpretación del film, o al menos la más sentida— da vida a Cheyenne, ese peculiar bandido que se resiste al progreso, y se alía con Harmónica para enfrentarse al dueño del ferrocarril, que utiliza métodos violentos —Frank— para el avance del mismo. Y en medio de este triángulo mortal, Jill, una prostituta de Nueva Orleans que quiere abrirse camino en su nuevo hogar. Una sensacional Claudia Cardinale interpreta dicho personaje —por primera vez en el cine de Leone, una mujer tiene protagonismo—, invención de Bernardo Bertolucci, que es autor de la historia al lado de Leone y Dario Argento, aunque el guión está firmado por el director y Sergio Donati.
A través de esos cuatro personajes Leone narra un cuento enmarcado en un período muy concreto de la historia de los Estados Unidos. Salvo Jill, los otros tres pertenecen a un mundo que ya expira, el de los pistoleros, que ven su forma de vida invadida por el progreso y la política. Frank intenta adaptarse a ello viendo que en el futuro cambiará las pistolas por un despacho desde el que tendrá un mayor poder, por lo que en cierto modo traiciona ese pasado evocador. Harmónica, Cheyenne y Frank ya no pertenecen a este nuevo mundo, al que Jill es la única que se agarra con todas sus fuerzas. Su historia de amor a tres bandas es una continua lucha entre deseo y razón. Estoicamente, con esa fuerza femenina tan característica, vive el amor mudo de Harmónica, el platónico de Cheyenne y el físico de Frank. La escena de amor entre ella y el último encierra todo lo que es ella —Frank lo ha descubierto, y el espectador se entera del pasado de Jill—, y todo lo que un hombre como él podría ser al lado de una mujer así. La influencia femenina en las acciones de los tres hombres es clara y contundente, mientras que al revés sólo es un episodio más, tal y como demuestra ese emocionante final en el que Jill, como olvidando los recientes hechos, da de beber a los cansados trabajadores que ayudan al avance del país.
Con claros ecos de Peckinpah, Leone dice adiós a la época dorada del western, dando no sólo paso a una nueva etapa crepuscular, y que el director de ‘Grupo salvaje’ (‘The Wild Bunch’, 1969) se encargó de asentar, sino también a un lugar intermedio, suspendido en el tiempo y que le pertenece por derecho propio, gracias a su tono de fábula. Sirva como ejemplo la impresionante secuencia que da comienzo con la llegada de Jill a la estación, su posterior paso a la ciudad que crece, y antes de llagar a su destino, atraviesa Monument Valley, escenario de varios de los westerns más conocidos de John Ford. La puesta en escena de Leone es de tal precisión que logra un instante de emoción única, que hurga en el pasado, sobre todo cinéfilo. Pasado, presente y futuro en la marcha de un carruaje al son de la no menos impresionante banda sonora compuesta por Ennio Morricone, quien se superó a sí mismo creando para cada personaje una melodía perfectamente reconocible, vistiendo psicológicamente a cada uno de ellos, sobre todo en el caso de Harmónica. Confieso que mi favorito es el destinado a Jill, una bella melodía que alcanza su esplendor en la voz de Edda Dell’Orso.

El western parecería incompleto sin ‘Hasta que llegó su hora’. Épica, lírica, violenta, bella como pocas, reúne a lo grande todos los elementos del cine de Sergio Leone —miradas eternas, tiempos muertos, elipsis que fluyen armoniosamente, violencia, y sobre todo el paso del tiempo y la muerte—, que visten su peculiar universo. La película fue un éxito en Europa, no así en los Estados Unidos, donde se estrenó recortada. En cualquier caso su influencia en el cine posterior fue de tal calibre que justifica prácticamente la existencia de varios cineastas cuyos nombres me niego a citar. El más grande western jamás rodado, sensación que queda tras sus visionado, es una de esas películas que quieren volver a verse justo después de verlas. ¿Qué tipo de películas dejan ese poso? Las obras maestras.
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Harry Powell
"Henry Fonda —también actor Fordiano— en un asesino implacable es uno de los mayores aciertos de casting que mis ojos han visto nunca."
No podría estar más de acuerdo,quién iba a decir que Fonda con ese aspecto de enclenque bonachón bordaría, y de que manera, el papel de cruel asesino. Sin duda alguna de lo mejorcito del film.
Genial Post de una grandísima película Alberto,saludos.
kirikin
Sin duda mi Western favorito, absolutamente impresionante y magistral. Fonda está inmejorable. Y la escena inicial, es una 'Obra Maestra' en si misma.
pvargas17
Que grande es esta película, y que grandes son Sergio Leone y Enrico Morricone, una de las mancuernas más talentosas y productivas que haya visto en mi vida. Concuerdo contigo en señalar que sin ella, muchos directores jamás hubiesen llegado ni a la mitad de lo que son en este momento, y es que la influencia de estos dos personajes en la historia del cine nos ha dejado un completo legado por el cual nunca dejaremos de estar agradecido.
Soy sincero en reconocer fiel admirador de este gran duo. Mi padre, un hombre sencillo amante del western me sentaba a su lado a observar estas verdaderas obras maestras (palabras que se usa en estos días con cierta ligereza) y me abrió las puertas a un trabajo inmenso que me gusta repasar cada cierto tiempo.
Brutal la escena que describes, Henry Fonda era para mi el bueno por excelencia, y me resultó impactante verlo en ese papel, sin duda uno de los mayores aciertos de este gran director, es una película que es imposible de olvidar.
cesar1963
Brutal. Leone, con muchisimo acierto, situa en el oeste y en el tiempo del avance del ferrocarril un tema que podría tener sitio en cualquier lugar y en cualquier momento. El tema central es el hombre y sus anhelos. Bronson es la venganza. Fonda es la codicia. Cardinale y Edda Dell’Orso son la esperanza. Robards es el contrapunto, es el conformismo.
ÁlexDarko
Esos nombres en la dirección, en el guion, en las actuaciones, en la música... No todas las películas poseen gente de tanto calibre. "Ver" a Fonda matar a un crío es impagable, y esos largos créditos iniciales con esa antológica secuencia acompañada de una de las mejores composiciones de Morricone -el tema de Jill es perfecto- no podían dar sino una obra maestra.
- ¿Hay un caballo para mí?
- Parece ser que hay un caballo de menos
- ... Yo diría que sobran dos.
crom
Una película grandiosa, actores que lo bordan (especialmente Henry Fonda), música excepcional, secuencias impresionantes como la del comienzo,... y planos inolvidables como los de los ojos azulísimos de los protagonistas.
Me hubiera gutado ese comienzo con los protagonistas de la Trilogia del Dolar, hubiera sido un puntazo. Eastwood, Eastwood,...
Gavanno
Gran película cargada de grandes silencios. Fonda está impecable, pero sólo por la impresionante Claudia Cardinale ya merecería la pena echarle un visionado. Es una de mis preferidas del género, poco más se puede decir que no se haya dicho ya de esta genialidad.
Espero que este ciclo no vaya por orden cronológico, porque si no muchísimas maravillas se van a quedar fuera. Buen análisis.
and the Ugly
El momento en el que niño sale de la casa, ese movimiento de camera, esos planos alternos de la cara del niño y de Frank, justo con la música subiendo: masterpiece.
Por cierto, mi version de Agachate maldito dura 2 horas y 27 minutos.
Aqui un bonito poster de la pelicula.
hristo
Magistral película, uno de los westerns imprescindibles de la historia del cine.
malpaso
Junto con 'La muerte tenía un precio', los dos mejores westerns de Leone. En esta película más que en ninguna otra, el director estira el tiempo a su antojo, casi hasta parecer excesivo, dotando a las secuencias de una épica que pone los pelos de punta. Narrando con un estilo inconfundible y utilizando el scope de manera maestra. Harmónica está claro que era un personaje escrito para Eastwood, una pena que no accediera, aunque Bronson cumple perfectamente. Jason Robards está sublime. Pero yo me quedo con Fonda, que se come la pantalla, parece mentira que alguien con esa cara pueda ser tan cabrón, creo que el papel le llegó con la edad justa, sus ojos hablan solos. Y cada vez que la Cardinale aparece, casi que se derrite el celuloide. !Qué recuerdos de infancia!
drvenkman
Cuando piensas en películas cómo ésta te das cuenta de lo huérfano que está el cine de actual de maestros como Sergio Leone,desde luego revisionar Hasta que Llegó su Hora,La Muerte Tenía un Precio,El Bueno El Feo y El Malo,o films de otros directores como Grupo Salvaje,Centauros del Desierto,El Hombre que Mató a Liberty Valance,La Diligencia etc,etc...te hace pensar que cualquier tiempo pasado fue mejor.
Sergio Leone le dió una nueva vuelta de tuerca al género con su trilogía y nos dejó un puñado de obras maestras eternas.
Alberto te felicito por este gran artículo y por el especial Western que vas a iniciar,ya tengo las botas con espuelas preparadas!!
pilar62
Una crítica extraordinaria Alberto, una de las mejores que has hecho en el blog.
El otro día leí una discursión bastante tonta, en la que uno afirmaba que los que sostenemos que al cine de antes era mejor, somos unos nostálgicos, y que muchas de las películas de ahora dentro de algunos años serían consideradas clásicos, como las antiguas. Pero luego ves películas como "Hasta que llegó su hora", que desmonta semejante falacia. ¿Cuantas películas actuales están a la altura de esta película?¿Cuantas películas actuales, reinventan, no ya un género, sino el propio cine?
Cine hecho con las tripas, con una pasión que hace que sus hasta sus largos silencios resulten entretenidos y apasionantes. Cine de autor que no va de intelectual. Sólo lamento que no esté Eastwood, no porque Bronson esté mal, sino porque carece del carisma que le hubiera dado el bueno de Clint. Eso hace que quede desconpensado a favor del malo, un Henry Fonda impresionante. Algún día se debería poner a una serie de actores- como el propio Fonda o Barbara Stanwyck- en el lugar que se merecen en la historia del cine, son actores que unen a un talento inmenso, la humildad y la ética del trabajo.
eluyeni
Todo lo que se escriba para reivindicar esta enorme película es poco. Y sí, digo reivindicar porque aunque es una obra maestra indudable, su calado en el público es notablemente inferior a la de otros westerns más "clásicos" de Leone u otros. Es más, diría que es un film al que le ha perjudicado su escaso éxito cuando se estrenó en los USA, y que tiende a olvidarse demasiado cuando se habla del western. Incluso hoy día conozco muchos a los que no les gusta porque les resulta lenta, triste y algo aburrida. Pero bueno, también hay gente a la que no le gusta nada la poesía...
Salu2 ;)
jorgepaez
Magistral pelicula, no solo de las mejores de su genero, sino del cine en si. Que bello y hermoso reportaje Alberto sin duda a la altura de tremenda pelicula, cine de calidad, que ya no se ve, que grande es Sergio Lione.
ssitte
Nunca me cansaré de verla. Un gozo para los sentidos.
falan
Por favor, con este vídeo de fondo http://www.youtube.com/watch?v=rgXFA_yP3jw leed esto:
"Me recuerdas mucho a mi madre. Era la zorra más grande de Alameda y la mujer que más valía del mundo. Quien quiera que haya sido mi padre fue un hombre feliz, durante una hora o un mes..."
ittoogami
Amo absolutamente este pelicula. Me ha encantado el post.
Me gustaria intentar una pequeña reflexion sobre ella.
Diria que Leone pretendio destilar la mistica del western en este film.
Ya el propio nombre original, con El erase una vez..., marca la pauta para este cuento sobre una epoca que tenia ya un cariz completamente mitico, con sus rituales, sus personajes y situaciones arquetipicas que creo que nadie supo asimilar, y diria que amar tanto como Leone.
Casi se podria decir que mas que tratar de reflejar una epoca, como pudieron hacerlo sus influencias, creo que el trato de sacar de estas historias de Ford, Hawks, Zimmerman, Ray, etc, esa esencia del genero que le enamoraraba. Para hacer, añadiendo su toque personal , este western casi arquetipico o ´´definitivo'', como se comenta en la critica,
Enorme pelicula en todos los sentidos , de esas donde todas las labores de produccion son absolutamente increibles. De esas a las que parece que el tiempo en vez de debilitarlas, las encumbra mas y mas.
Javier E. Burgos
Yo pienso que viendo el resultado, Charles Bronson en el papel de Harmónica fue todo un acierto, más aún que el que pudiese haber sido Clint Eastwood. Es un papel duro, frío, implacable ... y en ese sentido la expresión de Bronson supera a la de Eastwood, que ya es decir, pero solo hay que ver la escena del duelo final, impresionante. Luego me parece, según lo veo yo, que el Eastwood de esos años, a pesar de ser todo un tipo duro, tenía un aire chulesco y socarrón que no le hubiese venido bien al personaje y a la historia. Cito una frase que se le atribuye a Sergio Leone según pone un libreto que viene con la edición especial de la película :
(refiriéndose a Bronson) " es una especie de bloque de granito, impenetrable pero marcado por la vida. Un hombre que sabe exactamente lo que debe esperar "
Sin duda alguna es el mejor papel de toda su carrera.
Sobre lo de haber incluido a los tres actores principales de la Trilogía del Dolar, pues me alegro personalmente de que no se hiciese la verdad, porque más que un cameo habría sido una especie de guiño grotesco y ridículo, demasiado cómico para el tono tan serio que posee la película.
othar
Mi favorita, no me canso de verla.
maestrolee
Sin lugar a dudas mi Western favorito,una auténtica obra maestra del cine.A mí también me parece superior a la trilogía del dolar.Me gusta tanto que hasta llevo en el móvil la melodía de Harmónica.
Os recomiendo la edición especial en 2 DVD con varios documentales que merecen la pena. Creo que nunca ha habido tanta unanimidad en un artículo escrito por el Sr.Abuín
Pd:yo tengo una versión de 135 mín de Agachate Maldito que me compré hace años en el Carrefour.
fortress
Me impresionó sobremanera esta obra cuando a vi por primera vez. Su belleza es deslumbrante y tiene el mejor duelo de la historia del cine ( entre Charles Bronson y Henry Fonda). Es una pena que la tensión dramática queda algo diluida por el exceso de metraje. Por lo demás, sobresaliente.
trafalgar_
Probablemente mi película favorita. Y mira que ésta afirmación es verdaderamente difícil de hacer, soy patético con las listas... Pero es que ésto es una Obra Maestra con mayúsculas, arte en estado puro. Desde el primer minuto entiendes, con reverencia casi religiosa, que estás ante una manifestación sobrenatural.
Y el análisis ha estado a la altura, te felicito, me encanta tu estilo.
batlin
¡Muchas gracias Alberto! Pedi esta critica hace unas semanas y aqui esta...
Peckinpah y Leone han hecho mas por el cine que mucho endiosado con Oscar.
PD. Los acentos no me funcionan, mil perdones...
richardford
He de reconocer que gustándome Leone nunca me ha parecido un grande del western,me desesperaban secuencias enteras suyas con sus largas miradas y sus eternos silencios,me gustaba su trilogía del dolar y "Hasta que llegó su hora" me parecía un buen film,pero demasiado largo...
Pues bien,craso error,el tiempo que es el mejor juez coloca a todo el mundo en su sitio,a mí como un ignorante y a Leone como lo que es,un maestro del western,vistas otras veces me parecen estupendos films con una personalidad única por parte de Leone,su estilo que antes me irritaba ahora me apasiona y sin duda este film no se si es su mejor film,pero sí que es el mas bello,(a lo que contribuye maravillosamente Morricone),con unas interpretaciones sublimes,(mención especial a Fonda y Robards,aunque tambien están muy bien Bronson y Cardinale,más bella que nunca...)
Hoy me he comprado "Agáchate máldito"(film que no he tenido ocasión de ver),he leido que no es de sus mejores films,pero estoy deseando verlo.
Grande Leone y grandes expectativas con ese ciclo "westerniano" que se nos avecina,a ver si aparte de los títulos por todos conocidos nos descubres alguna joya oculta Alberto...