'24: Live Another Day', diversión sin adicción

'24: Live Another Day', diversión sin adicción
18 comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail

En su momento amé con pasión '24' y a día de hoy sigue siendo una de mis series favoritas, por lo que recibí con alegría la noticia de que Jack Bauer iba a volver a nuestros televisores en una miniserie en la que destacaba principalmente que iba a tener únicamente 12 episodios y que iba a estar ambientada en Londres. Nada de eso suponía un problema, pues hasta me alegraba la reducción del número de capítulos para evitar tramas de relleno que pudieran quitar fuerza a su naturaleza de serie adictiva hasta la médula.

El estreno llegó y tengo que confesar que los dos primeros episodios de '24: Live Another Day' me dejaron bastante frío, no ya por la clara repetición de esquemas ya utilizados hasta la saciedad que destacó mi compañero Jose en su momento, sino porque lo que en su momento me emocionaba y hacia sentir la necesidad de seguir devorando capítulos no estaba presente. Por suerte para todos, la cosa no tardó en mejorar y he acabado disfrutando bastante con su visionado, pero también me ha quedado claro que el tiempo de Jack Bauer ya quedó atrás.

Un vistazo a…
LAS 10 MEJORES SERIES DE LA DÉCADA (2010-2019)

Luces y sombras de '24: Live Another Day'

El regreso de Jack Bauer

Todos los héroes crecen, alcanzan su cénit y luego desaparecen para dejar su lugar a otros que ocupen su lugar. Es su ciclo natural y por ello no tengo problema en reiterar que sólo me creeré que '24' ha acabado cuando vea a Jack Bauer muerto y enterrado. '24: Live Another Day' es la propina necesaria tras dar marcha atrás en el último momento durante su anterior periplo televisivo y no puedo decir que las diferencias hayan sido muy grandes en lo que nos ofrece, pero sí que sus virtudes han perdido brillo y sus puntos débiles son quizá demasiado evidentes, aunque sin alcanzar en ningún momento el pobre nivel exhibido durante la sexta temporada o los primeros capítulos de la octava.

No ha faltado el típico topo que pone en riesgo toda la operación contra la célula terrorista, otras traiciones más o menos logradas -acabó gustándome más de lo esperado la utilizada para recuperar el bagaje previo de Bauer con los chinos y los rusos- los giros de guión finales para tapar cualquier carencia mostrada hasta entonces, las escenas de tortura y la ilusión de una adrenalina frenética en la que Jack Bauer es siempre el dueño y señor de todo, incluso en aquellos momentos en los que podría parecer un pelele sin poder decisión alguna.

La sucesora de Jack Bauer

El problema es que las cosas evolucionan y Jack Bauer sigue, por decirlo de la forma más directa posible, molando, pero está en un mundo en el que no termina de encajar. ¿Quién es el culpable de ello? Pues probablemente tengamos que remontarnos a la forma de estructurarlo todo, ya que la auténtica amenaza tardó un par de episodios en concretarse y luego fue neutralizada bastante antes de que '24: Live Another Day' llegase a su final, dando la sensación de que lo que vino después fue un poco pegote más que un peligro inminente, la gran baza para que una serie como '24' realmente pueda funcionar y darnos grandes momentos como la ejecución de Cheng o ese sacrificio del presidente Heller que luego, eso sí, se corrigió de forma un poco burda.

No ayudó mucho que la abrumadora mayoría de nuevos personajes tuviese el mismo interés que podríamos encontrar en una anodina cinta de acción, llegando a desaprovechar de forma evidente un fichaje tan estimulante a priori como el de Stephen Fry. Son dos las grandes excepciones en este punto, ya que tanto Yvonne Strahovski como Michelle Fairley elevaron de forma notable el nivel interpretativo con sus actuaciones, algo especialmente gratificante en el caso de la primera, ya que al principio no me terminaba de encajar en el papel de posible sucesora de Jack Bauer. A cambio, se estuvo a nada de destrozar por completo a Chloe alterando tanto a su personaje que por momentos daba la sensación de ser un personaje derivado del éxito de Lisbeth Salander más que a alguien que adoramos durante varias temporadas.

Un final que sigue sin serlo del todo

El intercambio

Hasta ahora puede parecer que estoy siendo muy duro con '24: Live Another Day' y que no disfruté de su visionado, pero no es, ni mucho menos, el caso. La cuestión es que veía en ella un regalo para los amantes de Jack Bauer y no pude evitar querer algo al nivel de esa serie que llegó a ser mi favorita durante varios años, llegando incluso a disfrutar con lo que en condiciones normales consideraría molestos defectos. Esto último no ha sucedido con '24: Live Another Day' y quizá por ello he tendido a centrarme más en lo negativo de una aventura que merecería en líneas generales un notable bajo.

Lo que sí que no logro entender es que las personas detrás de '24: Live Another Day' hayan optado por cerrar la trama de esta manera sin tener atada una décima temporada. Cierto que ya aquí habían sondeado la posibilidad de acabar con Jack Bauer y que siempre pueden vender así a FOX una última aventura suya, pero ante lo que quiero es que Bauer no acabe hundiéndose en la miseria como pasó en el cine con John McClane, quien ya mostró síntomas de debilidad en la aún entretenida cuarta película de la franquicia para luego insultar directamente a sus fans con la lamentable 'La jungla: Un buen día para morir'.

No obstante, '24: Live Another Day' ha sabido utilizar a Jack Bauer sin traicionar su modo de vida y mentiría si dijera que no tengo curiosidad por saber lo que le espera a manos de los rusos. Incluso podrían intentar contentar a los fans diciendo que su cuerpo es incapaz de soportar otra tortura como la que sufrió a manos de los chinos o que simplemente está viajando a una muerte segura. Las formas de enseñar su despedida apuntan hacia esa posibilidad, pero sería muy decepcionante acabar con las aventuras de Jack Bauer de una forma tan anticlimática.

En resumidas cuentas, '24: Live Another Day' ha sido fiel a la

Review de
esencia de la serie y de su protagonista, pero también ha sido incapaz de transmitir esa adictiva adrenalina que conseguía que simplemente quisiéramos ver más y pasásemos por algo sus fragilidades. Pese a que sus fallos no han impedido que fuese una miniserie entretenida y con grandes momentos, la sensación general que queda es que tendría que haber sido bastante mejor de lo que ha sido.

En ¡Vaya Tele! | '24: Live Another Day', Jack Bauer sigue en forma

Comentarios cerrados
Inicio