‘Killing Bono’ se define como una comedia rockera sobre dos hermanos irlandeses que luchan por abrirse camino en la escena musical de los ochenta, mientras sufren la meteórica ascensión de sus antiguos compañeros de colegio, los U2.
Nick Hamm se encarga de la dirección de esta adaptación del libro autobiográfico de Neil McCormick ‘I was Bono’s Dopplegänger’.
Ben Barnes y Robert Sheehan protagonizan la cinta, en la piel de los hermanos McCorkmick. Martin McCann es quien da vida a Bono, Mark Griffin es The Edge, Seán Doyle interpreta a Larry Mullen Jr. y David Tudor hace de Adam Clayton. El manager del grupo, Paul McGuinness, está encarnado por Sam Corry. El reparto lo completan Charlie Cox, Krysten Ritter y Pete Postlethwaite.
‘Killing Bono’ tiene previsto su estreno en el Reino Unido el 1 de abril de 2011. No sé si llegará alguna vez a pantallas españolas.
Ambos actores protagonistas despiertan mi interés por diferentes motivos: a Ben Barnes lo conocí personalmente en una entrevista con motivo de la segunda de ‘Las crónicas de Narnia’ y me resulta curioso seguirle la pista. Robert Sheehan es uno de los principales intérpretes de una de las series que más me gustan de hoy en día: ‘Misfits’, una visión muy diferente sobre el tema de los superpoderes, rodada con un gusto exquisito y en la que el personaje de Sheehan, Nathan, supone uno de los mayores hallazgos.
A pesar de estas curiosidades y de mi amor por la banda irlandesa, la pena es que la película, por lo que se puede ver en el tráiler, no tiene un aspecto muy prometedor. Cierto es que tiene más miga escoger la vida de unos perdedores que la de los triunfadores y explorar aquello de las malas decisiones que creemos que nos han cambiado la vida entera, pero parece basada en chistes malos y enfocada con un tono un tanto infantil.
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