'Hoy quiero confesar' o cómo el corazón asalta a la ficción nacional

'Hoy quiero confesar' o cómo el corazón asalta a la ficción nacional
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Hoy quiero confesar que me llena de estupor el hecho de conocer para qué está sirviendo el formato tv movie en nuestra programación televisiva. Y es que de los numerosos caminos que podía seguir este fenómero, está empeñado en recorrer el que menos me interesa y el que más indignación me produce. Al estreno mañana de ‘Hoy quiero confesar’, biopic sobre Isabel Pantoja en Antena 3 (que incluso se ha atrevido a retirar el anunciado final de la primera temporada de ‘Los Quién’ de su parrilla), se le unirán pronto más películas para televisión sobre la vida de Carmina Ordoñez, Rocío Durcal, Rocío Jurado y la baronesa Thyssen. Y no podemos olvidar que este fenómeno ya ha pasado por las historias de personajes como la duquesa de Alba o los príncipes de Asturias.

En definitiva, la vida de los personajes más recurrentes en forma de película, narrando los acontecimientos a los que una y otra vez ya se han hecho mención en los programas creados para despedazar este mundillo. Porque una tv movie sobre la vida de un famoso no aporta nada nuevo, salvo el juego de comparar lo parecido que es el actor de turno con el personaje que interpreta. Ese fue el motivo por el que la tv movie ‘Felipe y Letizia’, la más exitosa en cuanto a audiencia de los últimos meses, se convirtió en una gran parodia, provocando que las burlas en las redes sociales no tardasen en aparecer. Y, contemplando asombrado el boom rosa que se está dando en este género, me pregunto: ¿para esto han quedado las tv movies?

No podemos olvidar que si el 50% de las tv movies de hoy en día las cubren biopics sobre personajes del corazón, la otra mitad se ocupa de recoger aquellos acontecimientos sociales que han marcado la actualidad de nuestra historia reciente, hecho que a mí juicio es igual de reprobable. Hablo de tv movies como ‘Alakrana’, ‘Días sin luz’ o el próximo estreno de ‘Tres días de abril’, que se aferrean al morbo que produce un hecho reciente para sacar partido de él. En estos cálculos, hay un minúsculo margen de error, en el que se deslumbra un pequeño porcentaje, el de las películas para televisión que se centran en hechos históricos o en historias originales (que, aunque parezca que se hayan extinguido, también las hay).

La preocupación que siento surge tras comprobar que ese boom rosa que cubre la mitad de las tv movies de nuestra parrilla se ha comenzado a dar recientemente, algo que no esperábamos sobre todo tras conocer los malos datos de audiencia que cosechó la segunda parte de ‘La Duquesa’ allá por el mes de abril. Pero en las últimas semanas Antena 3 y Telecinco han dado luz verdes a numerosos biopics relacionados con el mundo del corazón que me temo que, si la acogida es buena, provocarán que próximamente ninguno de estos personajes se quede sin ser representado en la ficción televisiva.

El corazón en televisión está demostrando saber cómo autoalimentarse y renovarse con el tiempo, todo en torno a los mismos personajes, acontecimientos y enfrentamientos, algo que si analizamos objetivamente, también tenemos que reconocerle su mérito. Pero aporta tan poco al panorama televisivo que me da pena que ahora este género sea utilizado para crear un sinfin de tv movies rosas con las que rellenar parrilla, sobre todo porque pensaba que servirían para algo más de lo que al final están demostrando.

La esperanza la mantengo en algunas producciones que se encuentran alejadas de lo que comienza a ser habitual. Hablo de tv movies como ‘El ángel de Budapest’ (La 1) o ‘Rescatando a Sara’ (Antena 3), que me motivan a pensar que lo que vivimos hoy sólo es una moda pasajera que morirá tarde o temprano. Porque para ser francos, si me dan la opción de seguir una de estas biopics, que no harán otra cosa que mostrar una vez más la vida de los rostros habituales del mundo rosa, yo prefiero apagar la tele.

En ¡Vaya tele! | ‘Felipe y Letizia’, premio a la mejor parodia

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