'The Libertine', ni el gran Johnny Depp la salva

'The Libertine', ni el gran Johnny Depp la salva
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Que a estas alturas alguien dude de que Johnny Depp es sencillamente uno de mejores actores de la actualidad, incluso de toda la historia del cine, pues tiene un pequeño problema de ceguera mental. Ahí están interpretaciones como las de 'Ed Wood', 'Piratas del Caribe' o 'Charlie y la Fábrica de Chocolate' por decir sólo unas pocas, que si por mí fuera citaría toda su filmografía. 'The Libertine' es una película que Depp protagonizó antes de la magistral película de Tim Burton, pero que, como ocurre muchas veces con otras películas, su estreno se retrasó sabe Dios por qué razones hasta un año después. Cuando lo hizo el pasado mes de Noviembre en los Usa, pasó completamente desapercibida. Aquí puede que la notemos un poco más, pero no hay duda de que desaparecerá de las carteleras sin dejar rastro. Asi que los admiradores y admiradoras de Johnny Depp es mejor que os deis prisa, o si no tendreis que esperar al dvd.

La película narra los últimos días de John Wilmot, poeta del siglo XVII, que murió debido a todas las enfermedaes venéreas que contrajo, por sus excesos con el sexo y el alcohol. La historia da comienzo cuando Wilmot decide coger como protegida a una joven actriz a la que intenta hacer famosa, al mismo tiempo que se enamora de ella. También despertará las iras de su amigo, el rey Carlos II, por diversos motivos; y tendrá siempre a su lado a su resignada esposa, la cual nunca dejará de quererle a pesar de como Wilmot la desprecia.

Técnicamente, la película llama bastante la atención, sobre todo en lo que se refiere a ambientación y fotografía, las cuales harían las delicias del mismísimo Kubrick. Los decorados y el vestuario son enormemente meticulosos, y todo está cuidado al detalle, dando un aspecto de suciedad muy acorde con la época. Uno puede sentir esa suciedad en las escenas que acontecen en las calles llenas de barro. Y la fotografía, de aire tenebrista, también con una textura sucia, ayuda a la credibilidad absoluta sobre el retrato ambiental en el que se mueven los personajes. También podriamos decir que los actores están todos bastante bien. Por supuesto quien se lleva la palma es Johnny Depp, que vuelve a hacer suyo uno de esos personajes complejos, de los que da la sensación de que Depp sería el único que podría interpretarlos, como le ha ocurrido con otros papeles. El solito llena la pantalla, componiendo un personaje odioso y repugnante en ocasiones, que no goza ni del favor de los demás personajes, y tampoco del del público. Atención a su monólogo principal con el que abre el film, sencillamente sensacional.

El resto del reparto, sin estar a la altura de Depp, no desentonan. Samantha Morton, muy entregada e incluso desprendiendo un morbo inusitado en la actriz. John Malkovich, con maquillaje incluído, un poco más comedido que otras veces. Y Rosamund Pike como la esposa de Depp, está igualmente sensacional, aunque la disfrutemos poco. Una pena, porque es enormemente bella.

Sin embargo la película hace aguas por todos los lados, y una buena ambientación y unas buenas interpretaciones no logran salvarla de la quema. Laurence Dunmore, que se estrena en la dirección de largometrajes, se pierde en efectismos visulaes que no llevan a ningún lado, abusando de los primeros planos, como si quisiera rendir tributo a los actores para ensalzar sus trabajos. No consigue imprimirle un ritmo acertado, logrando por momentos que el film aburra bastante, y debido a un guión indeciso no cosigue que la película avance. Y es que uno de los mayores problemas de esta película es que no nos interesa en absoluto lo que le ocurre a los personajes, ya que todo está mal mostrado, y el tedio termina ahogando un film con enormes posibilidades.

Decir que la música del siempre magnífico Michael Nyman adorna bastante bien la acción, sobre todo con un par de canciones que hay por ahí, interpretadas por una voz femenina absolutamente maravillosa. También destacar alguna secuencia en lo formal, gracias a unos elegantes moviemientos de cámara. Escenas que suceden en un teatro.

Una película muy floja, cuyos aciertos no son suficientes para elevarla a la categoría de buena o incluso de interesante. Una verdadera pena, porque con ese material se podrían haber hecho maravillas, sobre todo en lo que respecta al personaje que Depp interpreta tan extraordinariamente. En ese aspecto, Dunmore no se ha atrevido, y nos ha ofrecido menos de lo prometido. Podría haber sido una película completamente escandalosa y povocadora, pero se queda en completamente aburrida y poca cosa.

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