Como ya es tradición, la revista estadounidense Premiere publicó en su número de junio, la lista de los 100 personajes más influyentes y poderosos de Hollywood.
Y aunque a primera vista pudiera parecer una frivolidad, con un examen más detallado la lista podría servir como una suerte de radiografía que nos muestra el estado de salud de la llamada Meca del Cine.
Para empezar, la lista de los 100 más poderosos se redujo a 50 lo que, según la revista, es indicativo de cómo el poder se ha concentrado en menos manos: una sola agencia, la CAA, representa a la mayoría de los artistas; dos de los más poderosos estudios se han vuelto sal y agua (MGM y Miramax) y son contadas las estrellas que venden (Hanks, Cruise, Will Smith).
Pero las sorpresas no se detienen allí. Según Premiere, el personaje más poderoso e influyente de Hollywood no es estadounidense. Tampoco es productor, ni ejecutivo. O, lo que es lo mismo, no es un tiburón de estudio. Es un artista, es neozelandés y se llama Peter Jackson.
En segundo lugar, y por segundo año consecutivo, se mantiene Steven Spielberg. Pero el tercer lugar está ocupado por quienes encabezaron la lista el año pasado: Steve Jobs y John Lasseter, de Pixar, quienes tampoco pueden ser catalogados como especímenes típicos de la fauna hollywoodense.
No, Lucas no está entre los 10 más poderosos. Está en el puesto 11.
