'Scary Movie 5', parodia como puedas

'Scary Movie 5', parodia como puedas
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El estreno de ‘Aterriza como puedas’ (‘Airplane!’, Jerry Zucker, Jim Abrahams y David Zucker Zucker, 1980) supuso un antes y un después para la comedia paródica en el séptimo arte. La coletilla ‘como puedas’ se convirtió en un auténtico emblema en España de un tipo de cine marcado durante muchos años por el inefable Leslie Nielsen. Sin embargo, la llegada de ‘Scary Movie’ (id, Keenen Ivory Wayans, 2000) prácticamente aniquiló esa tendencia, logrando también sobrevivir al uso de ‘de pelotas’, coletilla popularizada poco después por ‘Cuestión de pelotas’ (‘Dodgeball: A True Underdog Story’, Rawson Marshall Thurber, 2004).

Películas de tan dudoso interés como ‘Date Movie’ (id, Jason Friedberg y Aaron Seltzer, 2006), o ‘Superhero Movie’ (id, Craig Mazin, 2008) asociaron la idea de la parodia a una sucesión de gags escatológicos con un nulo timing cómico que confiaban en que ir acumulando referencias a varios títulos de éxito fuese suficiente para justificar su existencia. No obstante, ninguna de ellas llegó a poder competir de tú a tú con las secuelas de ‘Scary Movie’, franquicia que en su tercera entrega ya pasó a manos de uno de los hermanos Zucker, cambiando así un poco el tono de la franquicia. David Zucker decidió ceder las riendas a otro director en ‘Scary Movie 5 (‘Scary MoVie’, Malcolm D. Lee, 2013), la secuela que mayores varapalos críticos ha recibido, aunque en realidad mantenga un nivel similar al de sus anteriores entregas.

Los precedentes y la evolución de la saga

Imagen de la película

Fue el fenomenal éxito de ‘Scream’ (id, Wes Craven, 1996) lo que provocó no solamente un renacer del slasher a finales de los años 90, pues también sirvió como base indiscutible para ‘Scary Movie’, tanto a nivel argumental como por el hecho de que ‘Scary Movie’ era el título provisional de la cinta dirigida por Wes Craven hasta que lo cambiaron por el que hoy conocemos.

Ya en los años 80 hubo varias producciones que aprovecharon el auge del subgénero para reírse a su costa, pero títulos como '13 asesinatos y medio' ('Student Bodies', Mickey Rose, 1981) ‘Sábado 14’ (‘Saturday the 14th’, Howard R. Cohen, 2008 1981) —que tuvo años después una secuela alejada del género, algo que también sucedía con la primera, donde sólo el título remitía a un famoso slasher—, 'Pandemonium’ (id, Alfred Sole, 1982) —originariamente iba a titularse ‘Jueves 12’, pero decidieron cambiarlo a última hora— o ‘Wacko’ (id, Greydon Clark, 1982) estaban ya muy olvidados por aquel entonces.

La franquicia abandonó la parodia del slasher ya en la segunda entrega, quedando limitados los gags a su costa a breves fragmentos como el prólogo de la cuarta entrega parodiando a ‘Saw’ (id, James Wan, 2004). Siete años han tardado en sacar adelante ‘Scary Movie 5’, siendo la saga ‘Paranormal Activity’ el principal objeto de sus burlas, pero incluyendo un multitud de referencias a otras obras, tanto cinematográficas —‘Cisne negro’ (‘Black Swan’, Darren Aronofsky, 2010), ‘El origen del planeta de los simios’ (‘Rise of the Planet of the Apes’, Rupert Wyatt, 2011) u ‘Origen’ (‘Inception’, Christopher Nolan, 2010)— como de otras áreas —’50 sombras de Grey’— para así poder diferenciarse de ‘A Haunted House’ (id, Michael Tiddes, 2013). Se da la casualidad de que uno de los principales responsables de esta última es Marlon Wayans, quien participó como guionista y dando vida a uno de los protagonistas —el drogadicto— de ‘Scary Movie’.

Humor superficial de escaso recorrido

Imagen de la parodia de

La principal diferencia a priori entre ambas es que ‘A Haunted House’ ha costado apenas 2 millones de dólares, mientras que ‘Scary Movie 5’ ha multiplicado por 10 esas cifras, lo que ha acabado convirtiéndola en una decepción económica. Entrando ya en su calidad artística, aunque éste quizá sea un concepto que no debería mencionarse aquí, la fórmula sigue siendo la misma de las últimas entregas: Acumulación de gags de dudoso gusto —la fijación de los simios por la caca, la fealdad de la niñera de los protagonistas, etc.— a costa de otros títulos de éxito y alguna broma personal por el fichaje de Charlie Sheen y Lindsay Lohan, quienes demuestran no tomarse nada en serio a sí mismos, aunque la secuencia que protagonizan no tenga la efectividad cómica con la que pretenden enganchar al espectador ya de entrada.

El estilo visual realmente se acerca más al de la saga ‘Paranormal Activity’ que a cualquier otra película, pero en lo argumental acaba siendo ‘Mamá’ (id, Andrés Muschietti, 2013) el principal referente. Recordemos que la película de Andrés Muschietti se estrenó hace poco más de tres meses convirtiéndose en un inesperado éxito comercial, pero eso está lejos de darle ese aura especial que justifica el construir toda una parodia a su alrededor, funcionando todo mucho mejor cuando hay bromas de forma más o menos directa a costa de otros títulos del género —‘Posesión infernal’ (‘Evil Dead’, Fede Álvarez, 2013) o ‘La cabaña en el bosque’ (‘The Cabin In The Woods’, Drew Goddard, 2011)— que también han gozado últimamente de cierto éxito. El problema es que incluso en esos casos acaban limitando su efectividad cómica al estirar el gag más de la cuenta, pasando así de la simpatía inicial a una sensación generalizada de indiferencia.

Imagen de la parodia de

La ausencia de Anna Faris se nota y mucho, ya que la protagonista femenina de ‘El dictador’ (‘The Dictator’, Larry Charles, 2012) ha nacido para la comedia y eso permitía que las anteriores entregas brillaran un poco por encima de su discutible comicidad. Se notan los esfuerzos de Ashley Tisdale para evitar que esto se note, pero es incapaz de dotar del encanto requerido al cruce entre ser despistada y algo tonta tan característico de estas producciones.

En el caso del resto del reparto es evidente que intentan no limitarse a aparecer por ahí de forma más o menos gratuita, pero el discreto guión de David Zucker apenas se queda en la superficie de la broma en la abrumadora mayoría de los casos, es decir, en que la simple referencia ya sea tan hilarante que no haya que esforzarse más. Por su parte, la presencia de Malcolm D. Lee tras las cámaras es tan irrelevante que no se nota cambio alguno en el hecho de que se tuvieran que regrabar varias escenas y fuese Zucker quien se encargase de ello al estar Lee ocupado con otro proyecto. Vamos, un producto impersonal que apenas consigue sacar unas sonrisas al espectador que no sea demasiado exigente con este tipo de cintas.

Eso sí, 'Scary Movie 5' es mucho mejor que auténticos insultos cinematográficos como ‘Epic Movie' (id, Jason Friedberg y Aaron Seltzer, 2007), ya que al menos hay cierto control sobre el uso gratuito de la escatología y la forma más baja de humor existente, haciendo uso también de la parodia a películas ya ligeramente olvidadas en la mente del espectador y dejándose incomprensiblemente fuera otros títulos como 'La saga Crepúsculo: Amanecer. Parte 2' ('The Twilight Saga: Breaking Dawn. Part 2', Bill Condon, 2012).

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