Aprovechando la reciente finalización de la tercera temporada de 'Juego de Tronos', ayer comenzaba un artículo dividido en dos entregas en el que os comentaba cuáles consideraba que eran las doce mejores escenas de los últimos diez episodios de la serie adaptando la famosa saga literaria de George R.R. Martin. En esta ocasión me toca hablaros de las mejores momentos acontecidos entre 'El ascenso' y 'Mhysa'. ¡Vamos allá!
La charla entre Olenna y Tywin
Olenna Tyrell ha sido una de las grandes revelaciones de esta temporada, llegando a ser incluida por mi compañero David en su selección de cinco ancianas maravillosas e implacables del mundo de la televisión. Su capacidad para desarbolar a sus oponentes es indiscutible —nunca Tyrion pareció más inútil que cuando tuvo que negociar los términos de la boca con ella—, pero tuvo que hincar la rodilla en su encuentro con Tywin Lannister, uno de los pocos hombres, como ella misma reconoce, cuya fama hace honor a la realidad.
El monólogo de Meñique
La rivalidad entre Meñique y Varys siempre ha sido apasionante sin la necesidad de recurrir en ningún momento a la violencia, y es que la información puede ser más efectiva que el más mortífero de los asesinos. Ese pacto de no agresión entre ellos parece seguir en pie, pero Meñique dejó ver su lado más ambicioso y enérgico al soltar este monólogo sobre sus intenciones —a años luz de cierta escena de la primera temporada lastrada por tanto desnudo gratuito—, revelando al mismo tiempo que había localizado y anulado al topo que Varys había conseguido colar en sus filas.
El oso de pelo horroroso
Jaime Lannister ya se había ganado un hueco en nuestro corazón, pero aquí terminó de despejar cualquier duda que pudiera quedarnos sobre su transformación interior. Un coraje sin igual para rescatar a Brienne, la recuperación de su arrojo tras la dolorosa pérdida de su mano —hasta se permite un pequeño triunfo sobre su verdugo particular— y todo aliñado con la estupenda presencia de un oso de pelo horroroso y su debilidad por acabar con la vida de cualquiera que se cruce en su camino.
La rivalidad entre Margaery y Cersei
A Cersei Lannister nunca le ha caído bien Margaery Tyrell —en especial por su habilidad para controlar a Joffrey a su antojo—, pero era algo que tenía que disimular como buenamente podía en público y sólo confesaba sus verdaderos sentimientos hacia ella ante unos pocos. La insolencia de Margaery al llamarla hermana terminó de acabar con su paciencia, primero recurriendo a la amenaza velada y luego rematándolo de la forma más directa posible. Y no nos olvidemos de que es una escena que también nos da bastantes pistas sobre lo que nos esperaba en el siguiente episodio.
La boda roja
Comprendo que algunas elecciones de esta lista puedan pareceros discutibles teniendo en cuenta algunas de las que se han quedado fuera, pero la boda roja ha sido el gran momento de la temporada. Las trágicas muertes de Talisa —imposible no sentir dolor cuando la apuñalan con saña en el estómago—, Robb —memorable el detalle de ‘Los Lannister envían recuerdos’— y Catelyn —la muerte de su hijo acabó con las pocas ganas de vivir que tenía— fueron tan comentadas y polémicas que algunos seguidores de la serie hasta sopesaron anular sus subscripciones a HBO, pero todo estuvo tan bien llevado que no se me ocurre forma alguna de mejorarlo.
Los Lannister se enteran de la muerte de Robb
Uno podría esperar que la noticia de que la muerte de su principal enemigo sólo sería fuente de alegría para los Lannister, pero estamos ante una familia, por decirlo con suavidad, complicada. Un rey loco que cree que puede hacer lo que le apetezca, un patriarca con mano de hierro, una hija que hará lo posible para que los dos primeros no choquen entre sí y Tyrion, alguien demasiado inteligente para su propio bienestar. Además, la fuerza de la charla posterior entre Tywin y Tyrion supone la guinda perfecta.
¿Se ha quedado fuera de mi selección alguna de vuestras escenas favoritas de esta estupenda tercera temporada de 'Juego de Tronos'? He de reconocer que ha sido muy duro tener que reducir la selección a apenas una docena de momentos, pero creo que las escogidas representan a la perfección la genialidad de los últimos diez episodios de la serie.
En ¡Vaya tele! | Seguimiento de la tercera temporada
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