A estas alturas deberíamos todos moderar expectativas y costes en el cine si queremos una industria cinematográfica sana, y no nos llevemos disgustos tremendos cuando algunas películas fabulosas no rinden a nivel de remake nostálgico de Disney. Aún así, sigue siendo conveniente señalar la pena de que el público no acuda a ver obras que además de ser fabulosamente entretenidas no caen en tibieza por intentar complacer a todos los demográficos posibles.
Es imposible sostener una industria y una forma de arte como esta a base de únicamente bombazos espectaculares, y necesitamos también de películas de escala mediana con orientación adulta. Historias que atrapen por cómo son contadas y por explorar problemas medianamente reales. No estamos ahora mismo en un clima que favorezca este tipo de cine, relegado a menudo a una escala independiente, y nada lo evidencia más que el paso desapercibido por salas de dos títulos llevados a cabo por dos nombres importantes.
Los nombres son Steven Soderbergh y David Koepp, que han decidido volverse casi pareja creativa de hecho al realizar juntos películas como director y guionista respectivamente desde ‘Kimi’. Una alianza que revalidaron con dos de las películas más interesantes de este año en el cine americano, cada una de un género distinto, que por desgracia han tenido un desempeño en taquilla discreto. Estas son la sobrenatural ‘Presence’ y el thriller ‘Confidencial (Black Bag)’.
Ambas son propuestas bastante diferentes, desde el mismo género hasta su propia ejecución, pero acaban teniendo la clara conexión por las voces que deciden contarla. Soderbergh y Koepp tienen clara vocación por el cine de entretenimiento orientado a adultos, y lo que antes desempeñaban a un nivel de estudios lo alternan ahora entre esa escala y otra más independiente. Así lo han hecho entre una película de presupuesto pequeño y otra que cuenta con el nivel medio que solía ser tradicional, ambas particularmente interesadas en observar la integridad de un núcleo familiar.
Historia de un fantasma
‘Presence’ no fue realmente un fracaso, ya que su minúsculo presupuesto de 2 millones la hacía rentable con facilidad a poco que tuviera una buena distribución. También su carácter indie le hacía complicado ser un taquillazo, pero igual merecía tener un poco más de relumbrón. Siendo inferior a la otra película estrenada este año por esta pareja, en este relato sobrenatural nos metemos en un interesante misterio desde el punto de vista de un fantasma.
Quién es el espectro y por qué observa es parte de la intriga que sostiene la película, con la estructura de Koepp encargándose de ir distribuyendo cuidadosamente las cartas de cara a una gran revelación final. Eso, unido al énfasis que hace en explorar los dramas de una familia que llega a vivir a esta casa encantada, hace pensar en una especie de explotación de M. Night Shyamalan que no es muy extraña en el cine de este guionista.
Sí que es novedad para un Soderbergh que no había tocado el género de terror, pero encuentra en el mismo y en esta historia un buen repertorio de posibilidades para experimentar con la cámara. Operando de nuevo la misma, como es tradicional en él como director de fotografía, hace un concienzudo ejercicio de perspectiva que justifique los misterios y explicaciones caprichosas del material que tiene entre manos. Sus movimientos y posiciones estudiados al milímetro vuelven a realzar lo que se intenta contar, mientras vuelve a fijarse en la vigilancia, la exploración sexual y las tensiones por la economía que son temas recurrentes en su filmografía.
Historia de un matrimonio

Temas que, por supuesto, también vuelven en su thriller de espías de este año. ‘Confidencial (Black Bag)’ costó ostensiblemente más rodarla, unos 50 millones de dólares, y se quedó a unos pocos millones en taquilla de lograr esa cantidad. Fracasó comercialmente, lo que es una pena dado que no sólo es un entretenimiento supremo, si no una de las mejores películas del año.
Soderbergh se mueve aquí en un género que ha dominado más históricamente, pero también varía las herramientas que emplea (como esas luces sobreexpuestas que van reduciéndose progresivamente conforme se revelan verdades) para no caer en repetirse a sí mismo. De nuevo con un misterio diseñado con gran calibre por Koepp, elaboran un interesante juego de máscaras para indagar en relaciones sentimentales, incluyendo el matrimonio protagonista interpretado por Michael Fassbender y Cate Blanchett que se cuestiona si pueden confiar plenamente el uno en el otro.
No es la única relación con dudas en esta película, algo que guionista y director elaboran con mucha gracia desde el marco del relato de espías y el techno-thriller. Buen propulsada con un ritmo impecable y una duración bien ajustada a la hora y media, empleando de nuevo la cámara con absoluta inteligencia y dejándose llevar por una banda sonora genial, ‘Confidencial’ es un deleite que debería haber sido sensación. Igual lo habría sido en 1997.
Es un poco triste que películas tan frescas y diferentes, con puntos de vista tan singulares, no tengan un poco más de atención de primeras por el público. Pero no es una catástrofe, por suerte, ya que estamos ante dos cineastas que siempre están en movimiento y siempre encuentran donde caer. Koepp tiene oportunidad de sumarse un blockbuster de éxito con ‘Jurassic World: El renacer’ mientras que Soderbergh ya está en post-producción con ‘The Christophers’. No nos merecemos semejante entrega al cine por su parte.
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4 comentarios
suta
Presence es una película flojísima que se juega todo a su final. Podría ser película de sobremesa tranquilamente.
ElTamagochiAhoraEn3D
"Presence" me pareció una de las mejores películas que he visto este año.
"Confidecial"... Habría querido que me gustase más. Fui bastante perdido durante la mayor parte de la película respecto a qué me querían contar. Sólo hacia el final empecé a verle la gracia.
celuloide_feliz
"Black Bag" me gustó mucho.
asinox
Pues dejé Presence a mitad, y mira que soy de los que se ven todo...igual en algún momento la termino, siempre lo hago.