Ayer leía en el Twitter del crítico Oskar Belategui que el productor bilbaíno Javier Ibarretxe fallecía tras varias complicaciones de un cáncer de hígado. Tenía 52 años y fue el padrino de Nacho Vigalondo en sus comienzos, desde que lo premiara en un concurso de cortos de la universidad.
Desde entonces se convirtió en su mano derecha y produjo el cortometraje que dio el pistoletazo de salida a la carrera meteórica de Vigalondo: '7:35 de la mañana', por el que fue nominado al Oscar al Mejor Cortometraje en 2005. Una relación que culminaría en la producción del primer largometraje de Vigalondo, 'Los Cronocrímenes'.
Pero su labor como productor cinematográfico no se limito a Nacho Vigalondo. Querido por todos, Javier Ibarretxe también escribió junto a sus hermanos la comedia 'Sólo se muere dos veces' en 1997 que protagonizaron Álex Ángulo y Santiago Segura y en el año 2000 produjo su película más ambiciosa, 'Sabotage!', sobre la batalla de Waterloo y protagonizada por el británico Stephen Fry.
La comedia 'Un mundo casi perfecto', dirigida por sus hermanos Esteban y José Miguel y la argentina 'Las acacias' de Pablo Giorgelli (2011) fueron sus últimos trabajos. Se le echará de menos.
Vía | elcorreo Foto | Borja Agudo
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