'Prisioneros', la película

A partir de este viernes, la cartelera española se renueva con tres importantes novedades. Ya hemos repasado dos de ellas, 'El mayordomo' ('The Butler', Lee Daniels, 2013) y 'Caníbal' (Manuel Martínez Cuenca, 2013) y hoy vamos con la tercera, 'Prisioneros' ('Prisoners', 2013), un atractivo thriller que alcanzó el número 1 en la taquilla de Estados Unidos y que algunos de vosotros tuvisteis la fortuna de poder ver en la pasada edición del festival de San Sebastián.

La película parte de un guion original escrito por Aaron Guzikowski que llevaba desde 2009 intentando dar el salto a la gran pantalla. Bryan Singer y Antoine Fuqua tuvieron el libreto en sus manos antes de que se lo quedara Denis Villeneuve. Del mismo modo, actores como Mark Wahlberg, Christian Bale y Leonardo DiCaprio estuvieron interesados en encarnar a los protagonistas de esta historia --el primero quedó vinculado como productor ejecutivo-- pero en última instancia los papeles principales se los quedaron Hugh Jackman --premio Donostia 2013-- y Jake Gyllenhaal.

Ellos encabezan un elenco de auténtico lujo en el que también figuran Viola Davis, Maria Bello, Terrence Howard, Melissa Leo y Paul Dano. Por si fuera poco, del tratamiento de la luz se ocupa Roger Deakins, uno de los mejores directores de fotografía que trabajan actualmente. Sin duda estamos ante uno de los títulos imprescindibles de lo que queda de año.

La sinopsis de 'Prisioneros'

Jake Gyllenhaal y Hugh Jackman en una tensa escena

Keller Dover (Hugh Jackman) se enfrenta a la peor pesadilla de un padre. Anna, su hija de seis años, ha desaparecido, junto a su amiga Joy, y a medida que los minutos se convierten en horas, le va invadiendo el pánico. La única pista: una destartalada autocaravana que estuvo aparcada anteriormente en su calle. Encabeza la investigación, el detective Loki (Jake Gyllenhaal), quién detiene a su conductor, Alex Jones (Paul Dano), pero la falta de pruebas le obliga a devolverle la libertad...

Aunque la policía sigue múltiples pistas, la presión va en aumento al saber que la vida de su hija está en juego. El desesperado Dover decide que no tiene más remedio que ocuparse personalmente del asunto, pero ¿hasta dónde está dispuesto a llegar este padre desesperado para proteger a su familia?

El director

Denis Villeneuve se fotografía con las estrellas de la película

Quedaos con el nombre de este canadiense que acaba de cumplir 46 años. Denis Villeneuve ha tenido el singular honor de presentar este año dos títulos en certámenes tan importantes como los de Toronto y San Sebastián, 'Prisioneros' y 'Enemy' (2013). El éxito de su cuarto largometraje, 'Incendies' (2010), nominado al Oscar en la categoría de mejor film de habla extranjera --Villeneuve proviene de la Canadá francófona--, le abrió las puertas de la industria estadounidense y el cineasta lo ha aprovechado, encontrando un inesperado aliado en el popular Jake Gyllenhaal --protagonista de sus dos primeros trabajos en inglés, según el realizador ahora son como hermanos--.

Antes de probar suerte en Estados Unidos, Villeneuve era uno de los cineastas más laureados de su país, las tres últimas producciones que filmó allí fueron galardonadas con el Genie --el Oscar canadiense-- a la mejor película y la mejor dirección. Es, como ha quedado claro, un autor muy tenido en cuenta en festivales. Su ópera prima, 'Un 32 août sur terre' (1992), fue seleccionada en Cannes para competir en la sección "Un Certain Regard" de Cannes; en la Croisette tuvo lugar la presentación de su cuarto film, 'Polytechnique' (2009), y un año antes ganó el premio al mejor cortometraje por 'Next Floor' (2008). 'Maelström' (2000) le proporcionó en Berlín el premio FIPRESCI de la crítica internacional. Tras el éxito de 'Prisioneros', todas las miradas están puestas en Villeneuve y surge una inevitable pregunta: ¿cuánto tardará en dirigir un blockbuster?

Los actores

No creo exagerar al señalar que el mayor gancho de la película es ese póster con las dos megaestrellas de Hollywood, que no por casualidad son dos de los hombres más deseados del planeta, el australiano Hugh Jackman y el norteamericano Jake Gyllenhaal. Por suerte para los vamos al cine a disfrutar de las películas, y no de los cuerpos de los intérpretes, ambos se ha preocupado por algo más que la fama y el estatus, y aunque, como todos, han aceptado papeles en producciones comerciales mediocres, también han intervenido en proyectos más arriesgados que les han permitido demostrar su talento.

En el caso de Jackman, famoso por ser la encarnación cinematográfica de Lobezno (Wolverine), cabe destacar su labor en 'La fuente de la vida' ('The Fountain', Darren Aronofsky, 2006), 'El truco final: El prestigio' ('The Prestige', Christopher Nolan, 2006) y 'Los miserables' ('Les Misérables', Tom Hooper, 2012), por la que fue nominado al Oscar --por cierto, inolvidable número musical en el que nos dejó en la gala de 2009--. Gyllenhaal es uno de mis actores favoritos aunque ha tenido algún tropiezo importante, como 'Prince of Persia' (Mike Newell, 2010). De su filmografía hay que quedarse con 'Donnie Darko' (Richard Kelly, 2001), 'Brokeback Mountain' (Ang Lee, 2005) --gracias a la cual optó al Oscar-- y 'Zodiac' (David Fincher, 2007).

Gyllenhaal junto a Viola Davis y Terrence Howard en Prisioneros

Jackman y Gyllenhaal están acompañados por un estupendo grupo de secundarios encabezado por Viola Davis --'La duda' ('Doubt', John Patrick Shanley, 2008), 'Criadas y señoras' ('The Help', Tate Taylor, 2012)--, Maria Bello --'The Cooler' (Wayne Kramer, 2003), 'Una historia de violencia' ('A History of Violence', David Cronenberg, 2005)--, Terrence Howard --'Hustle & Flow' (Craig Brewer, 2005), 'Iron Man' (Jon Favreau, 2008)--, Melissa Leo --'Frozen River' (Courtney Hunt, 2008), 'The Fighter' (David O. Russell, 2010)-- y Paul Dano --'Pequeña Miss Sunshine' ('Little Miss Sunshine', Jonathan Dayton, Valerie Faris, 2006), 'Pozos de ambición' ('There Will Be Blood', Paul Thomas Anderson, 2007)--, el único de los siete que aún no ha sido candidato a un Oscar o un Globo de Oro, un dato curioso que es destacado torpemente en los carteles.