El cuarto episodio de 'El señor de los anillos: los anillos de poder' es uno centrado en, básicamente, darnos pista para los futuros de algunas de las principales civilizaciones de la Tierra Media. Uno, el presagio de la gran ola que sepultará Númenor, es algo evidente. El otro, no tanto... salvo para los conocedores del lore de Tolkien.
Y es que durante el episodio descubrimos que lo que tan celosamente están guardando los enanos de Khazad-dûm (o las minas de Moria) y, más en concreto, el príncipe Durin, es un metal prodigioso brillante y de color gris llamado, en sindarin, mithril. En palabras de Durin:
«Un nuevo mineral. Más ligero que la seda y más duro que el hierro. Como armamento, superaría nuestras mejores hojas. Como moneda, podría valer más que el oro. (...) Este podría ser el comienzo de una nueva era para nuestro pueblo. Fuerza, prosperidad...»
Un metal que, sin tener una correspondencia exacta, lo más parecido que tengamos en nuestro mundo sea el paladio o el titanio. ¿Lo malo? que es peligroso extraerlo. Algo prohibido por el mismo rey. Ahora, tendríamos que ver si esto es todo lo que esconde el clan, ya que al seguir sin confiar del todo en Elrond, podemos asumir que sabemos tan solo una parte de las cosas.
Es, además, un descubrimiento vital para la trama de la serie, ya que sabemos que de este metal sería Nenya, uno de los tres anillos de poder forjados por Celebrimbor para los elfos y poseído por Galadriel. Ahora tendremos que ver cómo llega este metal a sus manos, aunque todo apunta que Elrond tiene bastante que ver.
El despertar del balrog
Por otro lado, los escritos de Tolkien nos cuentan que los mineros enanos lograron darle partido a este metal, propiciando una era de esplendor para los enanos... pero también su destrucción.
Eso sí, no creo que veamos esta parte (al menos que decidan ser más "anacrónicos") en la serie, debido a que está ya bien adentrada en la tercera edad (y, por tanto, después de la derrota de Sauron y los hechos de 'Los anillos de poder').
Se cuenta que la escasez del metal llevó a los enanos a ser demasiado codiciosos y cavando donde no debían despertaron a un balrog durmiente en las profundidades de las minas. Este balrog es conocido como el Azote de Durin, pero no por Durin III o IV, sino por el VI. Después de este despertar y la destrucción que trajo consigo, los enanos supervivientes huyeron de Khazâd-dum y cerraron a cal y canto las puertas de Moria.
Lo que no quiere decir que no vayamos a tener a algún balrog en la serie. De hecho, se supone que al menos uno va a salir a juzgar por los teasers. Tras la derrota de Morgoth al final de la primera Edad, estos se refugiaron en las profundidades de la Tierra Media y suponemos que están "durmiendo". ¿Se despertará el de Moria o estamos en otro escenario? Eso es lo que la ficción de Prime Video debe resolver.
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