El principal objetivo de los primeros episodios de 'El señor de los anillos: Los anillos de poder' ha sido ir situando todas las piezas encima del tablero de cara a la inevitable batalla contra Sauron. Mientras tanto, la serie de Amazon también ha presentado diferentes localizaciones clave durante la Segunda Edad de la Tierra Media y a los personajes llamados a ser clave al menos durante esta temporada 1.
Eso es algo en lo que se vuelve a incidir en 'La gran ola', aunque aquí también puede verse que si el lema de 'Juego de Tronos' era "El invierno se acerca", aquí debería ser "(El regreso de) Sauron se acerca". De que solamente Galadriel (Morfydd Clark) esté convencida de su vuelta hemos pasado a que haya más señales y personajes convencidos de ello. Otra cosa es que la forma de hacerlo mostrarlo sido especialmente memorable.
Cuidado con los spoilers del episodio de aquí en adelante.
Varios frentes abiertos
Por un lado, Galadriel sigue demostrando que entiende muy poco de política y lo único que le importa es conseguir su objetivo. Esa determinación que caracteriza al personaje puede llegar a confundirse con arrogancia, aunque aquí lo más molesta es esa escaramuza con los soldados de Númenor para luego tener acceso al rey. No es un momento que llegue a ser ridículo -cosa que sí sucedió con el extraño momento a cámara lenta del tercer capítulo-, en parte por lo breve que es, pero es otro recordatorio de que la serie cuida mucho su acabado técnico y visual, pero en lo narrativo está claramente por debajo.
Con todo, lo molesto con su personaje es que está presentado de tal forma que llega a importarnos poco que sepamos desde el principio que tiene razón y que Sauron va a volver. Es una decisión extraña por parte de los guionistas, ya que como guerrera resulta convincente, pero ese ímpetu y rebeldía están mal canalizados y puede provocar que cuando la reina consorte recibe esa gran revelación que estaba esperando, uno no sienta que realmente se ha ganado conseguir esa ayuda que tanto necesitaba.
Curiosamente, los mejores momentos de Galadriel en 'La gran ola' son los instantes que comparte con Halbrand (Charles Vickers), pues la serie sí ha conseguido que surja una dinámica entre ambos atractiva y con gancho.
Otro punto fuerte de 'La gran ola' han sido las escenas entre Elrond (Robert Aramayo) y Durin (Owain Arthur). No es que me sorprenda, pues ya fueron lo mejor del segundo episodio, pero aquí se reafirma que es en esos momentos donde 'Los anillos de poder' mejor equilibra esa tendencia clara de la serie a tener diálogos sobrecargados en lo dramático y rozando la falta de naturalidad con los momentos más cercanos y accesibles, imprescindibles para que el público conecte con ello.
De paso, esa trama ha introducido en este universo al mithril, un metal precioso que traerá gran fama a los enanos. El problema es que también será su perdición, aunque tengo mucha curiosidad sobre si eso llegará a mostrarse en 'Los anillos de poder'. Por un lado, Amazon ha dejado claro que veremos a un balrog (¿el mismo de 'La comunidad del anillo'?) en esta primera temporada, pero por otro es algo que no termina de encajar temporalmente, por lo que me huelo que acabará siendo un flashback.
Luces y sombras
El otro gran punto de interés de 'La gran ola' ha sido la presentación de Adar (Joseph Mawle), un elfo oscuro con aviesas intenciones. Apenas un par de minutos han sido necesarios para que quede claro que es el personaje más intrigante de la serie hasta ahora, y eso que su decisión de liberar a Arondir (Ismael Cruz Córdova) cuesta entenderla. Bueno, sí, en lo argumental es necesaria para lo que llega después, pero lo que le lleva a tomar esa decisión es lo que tiene poco sentido.
Por lo demás, las dudas de Isildur y la disputa con sus amigos son algo que se presenta de forma torpe, pero al menos parecen zanjarse aquí con ese final marcado por el optimismo de cara a lo que está por llegar. Nunca está mal que haya un poco de luz antes de que llegue la oscuridad, pero el personaje de Maxim Baldry está siendo uno de los eslabones más débiles de la serie. Espero que eso cambie.
Otro aspecto francamente mejorable es todo lo relacionad con las Tierras del Sur más allá de Adar, ya que los humanos que allí habitan son los personajes menos interesantes de toda la serie -lo único salvable es todo lo referente al puñal de morgul, pero más por lo que sabemos que representa que por cómo se muestra aquí-. De hecho, no culparía a quien simplemente esté esperando que esa zona pase a convertirse en Mordor. Yo al menos estoy deseando ver a Mordor en su época de mayor esplendor, y todo apunta a que el primer gran evento en esa dirección sucederá más temprano que tarde.
Visualmente, 'El señor de los anillos: Los anillos de poder' sigue exhibiendo un poderío sin parangón, pero en los guiones y en la presentación de sus personajes sigue teniendo bastante por mejorar. Con todo, un episodio con luces y sombras que promete ser el inicio del fin para el componente más puramente introductorio de la serie.
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