Se echa de menos 'Malcolm'. Una de las sitcoms más míticas de la década de los dosmil entre otras cosas por su inventivos guiones y estilo visual. La serie ganó siete Emmys durante su recorrido, pero lo más curioso es que uno de ellos fue gracias a una niña de 11 años.
El episodio ganador en cuestión es 'Si los chicos fueran chicas'. Se trata del décimo de la cuarta temporada, en el que una Lois embarazadísima está inquieta sobre el sexo de su bebé. Aprovechando la temática de la guerra de sexos tan popular en el momento, la historia se desarrolla entera durante un día de compras en el centro comercial, en el que el descontento de Lois con sus niños le hace fantasear con la idea de tener niñas.
Las ensoñaciones de escenas idílicas de Lois con sus hijas (cada una siendo una contrapartida femenina de los chicos) se mezclan con la realidad que está viviendo. En un momento dado el estrés es tal que hasta sus propias fantasías le traicionan, y descubre que quizás tampoco sería un camino de rosas haber criado solo chicas.
Apuntando maneras
Este concepto fue idea original de Alexandra Kaczenski, una niña de 11 años que ni siquiera era parte del equipo principal de la serie, pero habituaba a visitar el set con su tía, Heidi Kaczenski, quien sí era la diseñadora de vestuario dentro del rodaje. Esa cercanía hizo que Heidi se pusiera en contacto con Linwood Boomer, creador de la serie, quién inicialmente se mostró escéptico, pero le acabaría pidiendo que escribiera un pequeño tratamiento de dos páginas. Boomer acabó soprendido con el resultado, como relatan sus declaraciones en Entertainment Weekly:
"Pensé, bueno, me llevará solo dos segundos de mi tiempo. Así que leí lo que había escrito, corrí a la sala de guionistas y dije 'Vale, acaba de pitchearme una idea Alex Kaczenski… sabéis la niña pequeña que va con Heidi?' Y me dijeron 'Vale, cuenta'. Y cuando lo hice toda la sala dijo: 'Es una muy buena idea', y yo en plan: '¡Lo sé!'".
El episodio acabaría siendo escrito por Nahnatchka Khan, una de las guionistas principales del equipo, pero Alexandra recibió un merecido crédito de "Story by" por aportar la premisa general, además del Emmy que, no se lo llevó la niña (aunque habría tenido su gracia) sino el equipo de edición.
Resulta que la niña apuntaba maneras, aunque no en el mundo del cine. Con los años Alexandra se alejó del audiovisual para dedicarse al mundo académico dentro de la Universidad de California, y con un gran interés en la historia del arte. En 2018 coescribió un artículo científico sobre manuscritos renacentistas. Quién sabe si el mundo se habrá perdido una gran guionista.
En Espinof: