Rian Johnson podía haber optado por el camino fácil y ponerse a trabajar en su nueva trilogía para Star Wars tras el estreno de ‘Los ultimos jedi’, pero el director de cintas tan estimables como ‘Brick’ o ‘Looper’ prefirió recuperar una idea que rondaba su cabeza desde el año 2010. Una cinta de misterio inspirada en las novelas de Agatha Christie que finalmente ha dado forma a ‘Puñales por la espalda’.
Johnson ha contado la ocasión con un reparto repleto de rostros conocidos para contarnos la historia de la misteriosa muerte de Harlan Thrombey -nombre que hace homenaje directo a una de las novelas de ‘Elige tu propia aventura’-. Para ello ha optado por maquinar un elegante y adictivo juego que mezcla el misterio con la comedia de forma brillante.
El juego de la sospecha
‘Puñales por la espalda’ es una película muy juguetona que en todo momento asume su condición de cinta que quiere molar. Esto puede suponer una barrera de entrada para algunos espectadores, pues si bien no es algo que nos restriegue por la cara sin vergüenza alguna, sí que requiere que el espectador asuma que no va a ver una película de suspense al uso, ya que Johnson también bebé de cintas de corte más paródico como la sensacional ‘Un cadáver a los postres’ o la divertida ‘El juego de la sospecha’.
De hecho, una de las principales claves de ‘Puñales por la espalda’ es lo bien que equilibra esas vertientes para convertirse en una película irresistible. Ya en el primer acto exhibe una energía diferente a lo que suele llegarnos de Hollywood, con un dinamismo envidiable se van introduciendo todos los personajes mientras nos rascamos la cabeza pensando qué puede haber sucedido exactamente con lo que parece un simple suicidio.
A ese componente juguetón ayuda que la víctima sea precisamente un escritor muy popular por sus libros de suspense -encantador Christopher Plummer-, por lo que el mismo sería el que mejor sabría guiarse por lo sucedido, incluso por encima de ese peculiar detective francés interpretado por Daniel Craig. Esa pequeña dosis de incertidumbre que aporta le viene de fábula a la película hasta que pone todas las cartas encima de la mesa por primera vez -y que no va a ser todo tan sencillo como eso-.
Una delicia
Tras presentarnos un estupendo carrusel de personajes en el que todos los actores dan la sensación de estar pasándoselo en grande -algo que se transmite en todo momento al espectador-, ‘Puñales por la espalda’ apuesta de forma decidida por uno de sus protagonistas -que a buen seguro no va a ser el que prácticamente nadie espera- y encauza el suspense en una dirección. Ahí lo rocambolesco que resulta de entrada se subraya exponiendo los hechos con claridad y dando al público todas las pistas que necesita para intentar encajar las piezas del puzzle.
Eso se apoya en todo momento en una puesta en escena fluida y elegante por parte de Johnson, la cual nunca se detiene más de lo necesario en nada pero tampoco comete el error de caer en un ritmo demasiado precipitado. Todo se va sucediendo a la velocidad idónea, potenciando además el humor o el misterio en función de lo que requiera cada momento, pero sin sacrificar nunca el otro. Era un cóctel peligroso que se podía venir fácilmente abajo, pero Johnson sale triunfante del mismo -especialmente acertado está en la forma de manejar la particularidad del personaje interpretado por una estupenda Ana de Armas-.
Y por si hubiera algún momento en el que pudiera decaer el interés -cosa que no sucede en mi opinión-, siempre nos queda un reparto entregado para la causa, capaz de aprovechar las pocas escenas que tiene para dejar huella y presentarte como aspirante a haber cometido el crimen. Disfruté muchísimo con todos ellos, pero me gustaría destacar especialmente la entrada de Chris Evans durante la lectura del testamento. Maravilloso.
Además, conviene destacar la honestidad de Johnson, también autor del guion, a la hora de construir el relato. La mayor licencia que uno puede ver en ella es que el personaje interpretado por Jaeden Martell parece una réplica directa a todos los ataques recibidos con ‘Los últimos jedi’, pero incluso entonces no se pasa de la raya. Aparte de eso, se agradece que no busque la sorpresa por la sorpresa -aunque sí haya varios giros a lo largo de su metraje-. Una cosa es jugar con el espectador y otra tomarle el pelo. Puede que así haya algunos que adivinen la solución antes de tiempo, pero el viaje es tan entretenido que tampoco resulta una pega insalvable para disfrutar con ella como con pocas películas en este 2019.
En resumidas cuentas
‘Puñales por la espalda’ es probablemente el mejor pasatiempo cinematográfico de todo este 2019. Sabe cómo jugar con el espectador sin resultar tramposa, combina muy bien los dos géneros principales, da con el tono adecuado y se presenta se forma fluida y elegante. A eso le sumamos un estupendo reparto que aporta todo lo necesario para que sus personajes cobren vida en lugar de limitarse a desfilar por pantalla. Volvería a verla ahora mismo y me da que lo haré en repetidas ocasiones a lo largo de los años.
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