Es la mejor película de los Coen y tan fascinante como sorprendente: llega a Netflix una obra imprescindible del cine de los 90

Barton Fink
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En la filmografía de los Hermanos Coen hay varios títulos que serían la envidia de muchos otros cineastas. Solamente hay que acordarse de obras como 'Muerte entre las flores', 'Fargo', o 'No es país para viejos', pero cada cual tendrá su favorita y en mi caso no dudo en decantarme por 'Barton Fink', una película que desde este martes 16 de agosto ya podéis ver en Netflix.

Magnífica e inclasificable

Estrenada en 1991, 'Barton Fink' nos traslada a los años 40 para contarnos la historia de un guionista alojado en un hotel que sufre un bloqueo mental a la hora de sacar adelante el guion que está escribiendo, complicándose todo más cuando en el lugar empiezan a suceder cosas raras. Una premisa muy estimulante de por sí, pero ojo, que la Troma ya había hecho algo similar años atrás con la estimable 'Asesinatos anunciados', aunque aquí justo es reconocer que las influencias son realmente otras.

Uno de los aspectos más llamativos de la película es que se resiste con todas sus fuerzas a ponérselo fácil a quien quiera encajonarla en un género concreto. Se podría decir que es una comedia negra, sí, pero juega con muchos más ingredientes e incluso se permite el uso de ciertos simbolismos que dieron mucho de lo que hablar.

Lo que es innegable es que la película logra captar tu atención ya en sus primeros minutos y luego plantea un camino repleto de detalles que recomiendan más de un visionado para disfrutarla plenamente. Y es que resulta muy fácil centrarse en el trabajo tras las cámaras, también en todo lo relacionado con su retrato del mundo del cine o simplemente dejarse llevar por las interpretaciones de sus dos protagonistas -atención también a la genial dinámica que surge entre los personajes de unos inmensos John Turturro y John Goodman-. Eso y mucho más, por lo que abordarlo todo en una sola vez posiblemente se quede corto.

Eso supone que también es una obra más compleja de lo habitual, por lo que aquellos que simplemente busquen una ración de escapismo cinematográfico, mejor que prueben con otra película. Y es que aquí encontrarán una propuesta fascinante capaz de grandes excesos pero también de imágenes muy bellas, todo ello con una energía especial a todos los niveles y una capacidad constante de sorprender al espectador.

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