El camino hasta hacer una primera película rara vez suele ser fácil. Desde la salida de la escuela de cine (en muchos casos) hay que pasar por diferentes etapas y trabajos hasta poder convencer a gente con dinero que tu idea vale la pena para ser financiada, o que eres una persona ideal para determinado proyecto que se está poniendo en marcha.
Está, claro, la vía de la independencia, pero no es ni mucho menos fácil. Las limitaciones presupuestarias van a ser un corsé importante en cómo vas a ejecutar esa idea que tienes en mente, y vas a tener que ser muy creativo para sortear problemas y dejar un acabado final cuyo carácter amateur no provoque rechazo absoluto. En muy raras ocasiones te encuentras increíbles proezas en materia de óperas primas independientes, como puede ser el caso de 'Posesión infernal'.
Me recomendaron bastante esta casa rural
Sam Raimi creó todo un clásico absoluto del cine de terror y una primera película magistral que se puede disfrutar en streaming a través de Filmin y de HBO Max. Aunque cuidado, en la plataforma de Warner sólo estará disponible hasta el día 31 de octubre. No te despistes si quieres darte un buen festín de Halloween con esta maravilla que cruza posesiones, libros malditos, cabañas terroríficas e inventiva visual a borbotones.
La premisa es justo la que se ha vuelto recurrente en el género, con un grupo de adolescentes que creen que van a pasar un fin de semana fantástico en una cabaña apartada en el bosque pero todo se va a ir de madre pronto. Una vez instalados, descubren unas extrañas grabaciones, con un científico hablando de un descubrimiento arqueológico sin precedentes pero aterrador, y un libro maldito hecho de carne humana que va a desatar un ejército maligno.
Pero la historia es quizás un 1% de lo que hace a 'Posesión infernal' una experiencia magnífica. A pesar de ser prácticamente un proyecto amateur, no luce como tal en ningún momento. El característico toque visual endiablado de Raimi se luce desde el minuto uno, con movimientos de cámara muy dinámicos que otorgan una fuerte personalidad a una entidad diabólica incorpórea que hará la vida imposible a los protagonistas.
'Posesión infernal': endiabladamente divertida
El sentido del humor macabro también hará una notable aparición, aunque queda como un esfuerzo franco y serio en comparación con el humor desatado e hilarante de su secuela 'Terroríficamente muertos', que se beneficia de mayor experiencia y dar más libertad de acción a Bruce Campbell.
Aun así, hay retorcidos toques divertidos en su manera de emplear los efectos especiales prácticos, como cada vez que aparece una persona convertida en un monstruo poseído.
Esa exquisitez en los detalles, en la creación de efectos tangibles sin dejar de sentirse sobrenaturales, y el nerviosismo empleado con la cámara crean una película electrizante y muy urgente, que no deja de zarandearte en sus 86 minutos de metraje. Raimi creó una película icónica, que sigue teniendo una fuerza increíble y en la que residen todas sus claves como cineasta que siguen latiendo hoy día en proyectos como 'Doctor Strange en el multiverso de la locura'.
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