Stan Lee fue el guionista principal de Marvel durante los 60: gustara más o menos su método, es innegable que fue la cara visible de la editorial durante los primeros años. Sin embargo, su momento de mayor fama a nivel de público general fue en la etapa final de su vida gracias a los cameos en las películas del Universo Cinematográfico Marvel. Sus apariciones estelares comenzaron en 1989 con 'El juicio del Increíble Hulk', pero después de sus treinta años de cameos aún nos queda el regusto de uno más.
Face it, Lambshack
Todos intuimos que si James Gunn no hubiera sido despedido de Marvel por un par de tuits, ahora probablemente estaríamos hablando del futuro reemplazo de Kevin Feige en lugar del jerifalte de DC. De hecho, estaba tan metido en la productora que incluso antes de darle la patada y provocar el primer gran cisma del UCM ya había escrito el guion de 'Guardianes de la Galaxia, vol.3'.
Los cameos de Stan Lee en las dos películas anteriores fueron increíbles (en una trataba de ligar con una jovencita, en otra contaba historias a los Vigilantes hasta que se aburrían) y en la tercera parte no iba a ser menos: Gunn había planeado darle el papel de Lambshank, una de las aberraciones genéticas del Alto Evolucionador que solo tiene la frase "Gracias" en la película (en un gag, por cierto, fabuloso).
Escribí la película antes de que Stan muriera, y sabía que se estaba haciendo muy mayor y que sería difícil traerle a Atlanta para rodar, así que hice un personaje que podría animar y que pusiera la voz, poniéndole una pequeña cara a lo Stan Lee. Pero, tristemente, Stan murió.
El último cameo de Stan Lee en vida fue, paradójicamente, en 'Vengadores: Endgame', dando por concluida la primera gran saga del UCM, pero ha habido referencias aquí y allí. La última, en 'Venom: Habrá matanza', donde sale en la portada de una revista de fondo. ¡Excelsior!
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