La complicada relación de Estados Unidos con la guerra de Vietnam tuvo también su reflejo en su cine, especialmente en lo comercial. Miradas críticas con la entrada en un conflicto donde no se debió entrar y dejó traumas irreparables en sus soldados convivieron con intentos de explotar esa rabia con demenciales espectáculos. Luego llegaron películas que intentaron tenerlo todo, como ‘Acorralado’.
Acechado y furioso
El inicio de la saga de John Rambo, una de las más icónicas lideradas por Sylvester Stallone, se convirtió en un increíble fenómeno que cruzaba supervivencia, acción salvaje y ligera reflexión sobre la recepción de los veteranos de Vietnam. Un sensacional trabajo que lanzó una de las trilogías más exitosas de la década de los ochenta, que se podrá ver hoy en televisión a través de Be Mad a partir de las 22:25 (también en streaming a través de FlixOlé y de Movistar+).
En ella, el veterano boina verde se encuentra caminando por las carreteras de Estados Unidos, esperando juntarse con un antiguo compañero de la guerra. Sin embargo, la policía de un pequeño pueblo lo toma por un vagabundo, y no sólo lo contiene sino que se ensaña con él. Eso desata una serie de recuerdos traumáticos sobre las torturas vividas y le lleva a enloquecer y pelear contra todo el mundo.
La adaptación de la obra original es un proyecto que estaba obsesionando a Hollywood desde hace más de una década, con diferentes actores en la órbita para protagonizar el proyecto. Todos bastante diferentes a Stallone, que no sólo permite a Ted Kotcheff hace una convincente película de acción y supervivencia sino que permite refinar ligeramente todo para que siga habiendo un mensaje que contar.
Desde luego resalta mucho la diferencia entre las posteriores películas de Rambo, mucho más orientadas hacia la acción exagerada y testosterónica de los ochenta (o la ultraviolencia de este siglo), mientras que esta película trata de contenerse durante largo rato. Ese primer acto, pausado para explorar a un veterano de Vietnam siendo rechazado por aquel hogar por el que supuestamente luchaba, explora sentimientos muy encontrados que van más allá de la adrenalina que se desata luego.
Luego Kotcheff lleva todo con increíble pulso de thriller y acción clásicas, mostrando el increíble repertorio de recursos de un personaje que ha activado una parte de máquina de matar que creía apagada. Parte slasher donde sigues al asesino un poco más que a las víctimas, dando una textura especial al que probablemente sea el personaje más querido por parte de Stallone.
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