Ibai Llanos tiene un problema bastante grande ahora mismo. Por un lado, la televisión tradicional no se ajusta a lo que él entiende por entretenimiento ni, probablemente, puede darle los presupuestos que maneja para hacer cosas como 'La velada del año'. Por otro, Twitch es inestable y los cortes continuos dan una experiencia infame a muchos de los espectadores que se acercan a ver estos macro-eventos en directo, demostrando que fuera de un ambiente controlado los sueños de grandeza se quedan, inevitablemente, un poco a medias. Por épicos que sean.
Voy cruzando el river
Ayer 'La velada del año 3' fue más espectacular que nunca. A nivel técnico, más allá de una mezcla de sonido infame en ocasiones, era más impresionante de lo que una retransmisión de boxeo ha sido jamás en España, pero el problema es que los cortes continuos, que dejaron a muchos (Rubius incluido) sin ver el final de algunos combates, impidieron que el récord de visionados de la historia de Twitch (3,44 millones de usuarios conectados al mismo tiempo) se hiciera más grande y definitivo.
¿Habría tenido más tirón 'La velada del año 3' sin los cortes? ¿Sería un golpe en la mesa que marcara un antes y un después? Tristemente, no lo podemos saber, y da la impresión que, pese a sacar pecho, se ha quedado ligeramente estancado: es un evento multitudinario, sí, pero cada vez más destinado exclusivamente a los usuarios de Twitch, dejando aparte a todo ese público que podría entrar para ver un combate entre famosos más tradicionales.
Es normal, claro. Twitch es su propio microcosmos igual que lo es Twitter o 'Sálvame': una vez has entrado en él crees que todo el mundo debería conocer a La Rivers, Coscu o Fernanfloo. ¿Cómo no vas a hacerlo, si tres millones de personas lo hacen? Pero lo cierto es que, paradójicamente, esta Velada ha supuesto, al mismo tiempo, confirmación de éxito, lección para las televisiones y estancamiento del proyecto entre aquellos ajenos al mundo del streaming. Que son más de los que creéis.
A puñetazo limpio
En el caso de La Velada del Año 3, el combate más esperado era el que enfrentaba a Rivers y La Rivers, que empezó como pura risa porque los nombres eran iguales y acabó, tras el pesaje, como un enfrentamiento repleto de odio que acabó ganando la española a los puntos, algo con lo que muchos usuarios no estuvieron de acuerdo. Sin embargo, Sammy Rivers tuvo su venganza unos combates después como la misteriosa contendiente que se enfrentó a Mayichi. La somanta de palos fue tal que no les quedó otra que darle la victoria.
Como si fuera una buena película de Marvel, 'La velada del año 3' sirvió, en gran parte, para calentar 'La velada del año 4': Marina Rivers pidió su venganza contra México personificado en Ari, Rubius volvió a desafiar a xQc e Ibai invitó formalmente a Misho y Shelao después de un combate que duró apenas veinte segundos porque el búlgaro se luxó el hombro al lanzar un puñetazo.
Por su parte, Abraham Mateo ganó de manera inesperada contra Ampeter, Fernanfloo venció por los puntos contra Luzu y en el último gran combate ganó el personaje más polémico de la noche, Coscu, acusado de abuso sexual a menores. Sin embargo, la gente demostró tener mucho más amor por Germán Garmendia, que se levantó del suelo incluso tras el último de los puñetazos al mejor estilo 'Creed III'.
Festival de luz y color
Después de muchos años donde el boxeo en España ha olido a polilla y naftalina, Twitch, actuando como la nueva vieja televisión, lo ha traído de vuelta y le ha dado una capa de novedad urbana gracias a la participación de artistas (donde, entre autotune y karaoke, destacaron unos Estopa pletóricos al repasar su primer disco). Es sorprendente que ninguna televisión haya cogido el guante lanzado por Ibai y haya montado noches de boxeo entre famosos, quizá por no evidenciar la distancia social que existe entre el público joven y el que aún disfruta de las cadenas en abierto.
Que las críticas no impidan ver el sol: La Velada del Año 3 se ha atrevido a hacer lo que la mayoría de streamers, acomodados en las reacciones y los gameplays, jamás podrían: llenar todo un estadio como el Wanda con un evento único, diferenciador y que ratifica a Ibai Llanos como la verdadera estrella del panorama del entretenimiento patrio por encima de muchos otros que copan titulares.
Por mucho que podamos ver este evento con cierto recelo, sarcasmo o desde nuestra torre de marfil del Entretenimiento Bueno, lo cierto es que las veladas de boxeo son un evento anual que marcará infancias y será recordado en el futuro, cuando La Velada del Año mute, evolucione, se vaya o se haga semanal. Porque Twitch tiene algo que la televisión tradicional jamás podrá tener: el poder de la imprevisibilidad.
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