El pasado 29 de septiembre —hace cuatro días, vamos—, os contábamos que Disney+ ya había comenzado a ejecutar la primera fase de su plan para purgar las cuentas compartidas de su servicio, enviando un primer aviso a los suscriptores canadienses de que eso de repartir contraseñas para ver su contenido "fuera del hogar" se va a acabar a partir del próximo 1 de noviembre.
Se acabó lo que se daba
Pues bien, según ha recogido el medio Variety, la maniobra continúa viento en popa, y es que la compañía ha enviado una notificación a sus suscriptores de Canadá —el país que sirve de prueba piloto— informando de que "a menos que esté permitido de otra manera por su nivel de suscripción, no podrá compartirla fuera de su hogar".
Además, en el comunicado puede leerse la parte más drástica del asunto, en la que afirman que "podemos limitar o cancelar el acceso al servicio y/o tomar cualquier otra medida permitida por este acuerdo". Una misiva de la que se extrae que se van a tomar el tema muy en serio y que, probablemente, pongan al alcance de los suscriptores nuevos planes para poder utilizar sus cuentas fuera del domicilio habitual.
Este mismo verano, verano Bob Iger, mandamás de la casa del ratón, avisó de que ya estaban preparando una estrategia para monetizar las cuentas compartidas:
"Estamos explorando activamente formas de abordar el intercambio de cuentas y las mejores opciones para que los suscriptores paguen por compartir sus cuentas con amigos y familiares. Más adelante este año, comenzaremos a actualizar nuestros acuerdos de suscripción con términos adicionales sobre nuestras políticas de intercambio, y pondremos en marcha tácticas para impulsar la monetización en algún momento de 2024".
Sea como fuere, el próximo 1 de noviembre, junto a la limitación de las cuentas compartidas en Canadá, llegarán a todo el mundo los nuevos planes de precios a Disney+, incluyendo un plan con publicidad a precio reducido. Ay, streaming, quién te ha visto y quién te ve.
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